baloncesto

Nada frena al Casademont Zaragoza

El equipo aragonés se impone con autoridad al Murcia (80-70) y suma su decimoquinta victoria en la Liga ACB.

Partido entre el Casademont-UCAM Murcia.
Partido entre el Casademont-UCAM Murcia.
Francisco Jiménez

Fue una contienda desigual. El Casademont Zaragoza exhibió su mejor versión, sobre todo en un primer tiempo formidable, y solventó el duelo con carácter, aplomo y prontitud. Superó al UCAM Murcia (80-70), en un nuevo ejercicio de brillantez colectiva, y dispuso de otro plácido encuentro al abrigo de su afición. El resultado fue una victoria amplia y concluyente, irrebatible, ante un rival del que no se esperaban concesiones. 

El equipo visitante es un bloque intenso, siempre presto al combate, con unas capacidades físicas sobresalientes y que dispone, además, de una amenaza gigantesca en el tiro exterior. Argumentos ya que evidenciaron en el partido de la primera vuelta, cuando derrotaron a los aragoneses tras convertir hasta 18 lanzamientos triples. Este sábado, sin embargo, no tuvieron opción alguna en el pabellón Príncipe Felipe, sometidos por el extraordinario desempeño de los locales en los dos lados de la pista. Al descanso, los de Fisac ya habían acumulado una renta de 21 puntos en el marcador (47-26), y caminaban con paso firme hacia su decimoquinto triunfo de la temporada. Fue otra actuación de altura de los zaragozanos, que siguen batiendo todos los registros y continúan lanzados hacia el ‘play off’. Sólo al final, con el encuentro ya sentenciado, pudieron reducir distancias los murcianos y firmar, de esta forma, un marcador más decoroso.

El Casademont inició el duelo con seguridad y convicción. Sobre todo en sus acciones ofensivas, donde se empleó con criterio y paciencia, con las pausas preceptivas, para atacar las debilidades de su rival. Seeley, con siete puntos consecutivos, lideró el despegue de los zaragozanos (9-4, minuto 4), frente a un oponente frágil y quebradizo atrás, con importantes desatenciones, que además también se manejaba en ataque con una dificultad manifiesta, A ello contribuyó sobremanera el cuadro zaragozano, de nuevo sólido y perseverante en las labores de contención, sin apenas fisuras. A los seis minutos de juego, los visitantes sólo habían facturado cuatro puntos, todos de Larentzakis, y los locales ya caminaban con paso firme hacia la victoria. El preparador de los murcianos, Sito Alonso, tuvo que detener el duelo (11-4), tras una fácil canasta de Nemanja Radovic, para corregir los desequilibrios de su equipo.

Tras el tiempo muerto, el Murcia elevó sus prestaciones defensivas. Fue un bloque más intenso, enérgico y vigoroso. Se empleó con mayor vehemencia en cada una de sus acciones, y el Casademont dejó de anotar. El desacierto ofensivo de los zaragozanos enseguida se trasladó al marcador, con los visitantes situados a sólo dos tantos (15-13) en los últimos compases del acto. Dylan Ennis, con una penetración -mezcla de fuerza, potencia e ingenio- estiró la ventaja de los locales (17-13) justo al cierre del primer parcial.

Después, el partido se endureció por momentos. Se tornó áspero, trabado, y los dos conjuntos tuvieron numerosos problemas para generar ventajas en sus ataques. En este escenario, Seeley asumió la responsabilidad ofensiva de los aragoneses. El escolta es un lanzador formidable, certero, prácticamente infalible, que representa una amenaza permanente para el rival por su amplitud de recursos. Y nunca se esconde. Así, en un momento especialmente comprometido, de nuevo emergió con acierto para azotar al Murcia desde todas las posiciones. Primero, con un triple tras una generosa asistencia de Vit Klejci; posteriormente, con una canasta que él mismo se fabricó; y en la jugada posterior, exhibiendo su talento en un ataque que finalizó Radovic, tras una gran acción colectiva, y que conllevó el tiempo muerto de Sito Alonso. Al cuarto de hora, el Casademont había establecido su máxima ventaja del partido (28-18).

El segundo acto también dejó engrandecida la figura de Krejci, un jugador formidable, provisto de un futuro prometedor. El canterano amplió la renta de los locales hasta los 14 tantos (34-20), después de un robo de balón que supuso la falta antideportiva de Jarell Eddie. Por entonces, el equipo visitante ya era un bloque roto, desnortado, deprimido, sin alma, sin carácter, sin fe. Y el Casademont no desaprovechó concesiones de tal magnitud. Al descanso, los de Fisac ya disponían de renta de 21 puntos (47-26), con DJ Seeley como principal ejecutor. El escolta, muy incisivo, contabilizaba 17 tantos en el intermedio, con un 70% de efectividad en los tiros de campo, en el cuarto de hora que había permanecido sobre la pista. Menuda exhibición.

Ya no hubo partido en la reanudación. El Murcia, resignado a suerte, apenas mostró capacidad alguna de reacción en los primeros minutos del tercer acto. Trató de mantenerse erguido con el talento de Askia Booker (18 tantos a la media hora de juego); pero el base, por entonces, representaba el único argumento ofensivo de los visitantes. Su capacidad anotadora, descomunal, no tuvo el acompañamiento del resto de la plantilla, para alivio de los locales. Si acaso, asomó por momentos Larentzakis, aunque sin continuidad, con su habitual juego entrecortado. Nula fue la aportación de Jarell Eddie, quien exhibió un desatino inusual en sus lanzamientos: erró sus ocho triples, cuando había presentado un 48% de acierto desde el perímetro en las 19 jornadas anteriores.

En el último cuarto, el Casademont redujo el ritmo, las revoluciones y la intensidad -nunca el entusiasmo-, y el Murcia sí pudo recortardistancias en el marcador. A ocho minutos del final, los de Sito Alonso se habían colocado a 12 tantos (63-51), lo que supuso el tiempo muerto de Porfirio Fisac. Ya hace tiempo que los zaragozanos habían reducido drásticamente su facturación.

En cualquier caso, el triunfo de los aragoneses nunca llegó a peligrar. Menos aún con Radovic (17 puntos) y Fran Vázquez gobernando en la pintura con oficio y autoridad, y con Ennis, Seeley y Brussino sumando desde la línea exterior. El choque, además, dejó el debut en la Liga ACB de Josep Fermí Cera, otro de los valores emergentes de la cantera zaragozana.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión