El circuito de Sepang en Malasia abre el fuego de una nueva temporada del Campeonato del Mundo de Moto GP. Los test del 6, 7 y 8 de febrero en la categoría reina permitirán ven en acción a los pilotos probadores de las diferentes marcas: Ducati (Michelle Pirro), Honda (Stefan Bradl), Yamaha (Jonas Folger), Suzuki (Sylvain Guintoli), Aprilia (Bradley Smith) y KTM (Mika Kallio). Tras ellos entrarán en acción los titulares, que en estas semanas y días previos han dado a conocer con las nuevas monturas, que llegarán a Aragón en septiembre. El circuito de Motorland, tan preciado por las estrellas de la velocidad, recibirá, por décima edición consecutiva, a la caravana mundialista del 20 al 22 de septiembre. Y ahí aspira a brillar un hombre muy querido en el Bajo Aragón: Álex Rins.

El piloto, con raíces en la localidad de Valdealgorfa, ya está listo para iniciar un nuevo curso defendiendo los colores de Suzuki, escudería a la que llegó en 2017 para dar el salto a la categoría de Moto GP y donde este año, como líder, aspira a conquistar la ansiada victoria tras firmar en 2018 tres segundos puestos y dos terceros para concluir quinto en la general tras Marc Márquez, Andrea Dovicioso, Valentino Rossi y Maverick Viñales.

Álex Rins presentó este domingo 3 de febrero, junto con Joan Mir, la GSX-RR para 2019 apenas unos días antes de ponerla a prueba en el esperado test de Sepang. Y habló sobre sus retos: "El objetivo numero uno es hacer una moto competitiva y ganadora. Estamos preparados para la victoria", contesta rotundo.

Los cinco podios cosechados por el piloto aragonés de adopción han dejado huella en Suzuki. Rins, que actualmente reside en el Principado de Andorra, espera que el paquete de mejoras desarrollado en Japón le permita "seguir creciendo". "He mejorado mucho en estos dos años con Suzuki, he vivido muchas experiencias y he madurado rodando al lado de los pilotos delanteros en situaciones de todo tipo. Sé que me queda mucho por mejorar y nunca paras de aprender cosas nuevas", explica el deportista.

Rins asegura que "no" siente presión por su rol de líder de Suzuki. "Ya desde el año pasado estaba centrado en mi moto y en el desarrollo de la GSX-RR. No supone un gran problema no tener a un piloto experimentado a mi lado este año. Al final, lo que tenemos que hacer es centrarnos en nuestro trabajo y en nuestro desarrollo e intentar aportar a Suzuki todo lo posible para hacer una moto ganadora", reitera. Una máquina que, cree, "mejora en todos los aspectos: en la frenada, en el paso por curva, en la aceleración, en velocidad punta", concluye Rins.

Rossi y Viñales activan el "Modo bestia"

Si el domingo fue la puesta de largo de Suzuki, este lunes ha sido el día elegido por Yamaha para presentar su YZR M1 que pilotarán sus dos estrellas: el italiano Valentino Rossi y el español Maverick Viñales. Un céntrico hotel de Yakarta (Indonesia) ha sido el escenario para la puesta de largo de los nuevos colores de  las motos y cuyo principal lema han denominado "Modo bestia activado". Máquinas que pierden a su hasta ahora principal patrocinador, Movistar, en favor de la bebida energética Monster.

Tanto Rossi como Viñales se han mostrado ansiosos por el inicio de la pretemporada en Sepang: para 'Il Dottore' representará su decimocuarta campaña con Yamaha desde que firmará su primer contrato en 2004 y la séptima consecutiva desde que en 2013 regresara tras estar un par de años en Ducati.

En el caso de Viñales ésta será su tercera temporada en la escudería japonesa, lo que le motiva para mejorar los resultados de anteriores ediciones, ya que en la primera con el fabricante de Iwata acabó tercero y en 2018 fue cuarto, a cinco puntos del tercero, su propio compañero de equipo, con Australia como la única victoria de un piloto oficial de la marca en todo 2018.