Un esfuerzo titánico en el desierto

Trece aragoneses desafían desde este domingo los parajes montañosos de Marruecos y su inhóspito desierto, escenarios de la exigente Gaes Titan Desert.

Los zaragozanos Roberto Arellano, Jorge Chico y Antonio Layús.
Los zaragozanos Roberto Arellano, Jorge Chico y Antonio Layús.
Facebook

Un total de 619 kilómetros cronometrados repartidos en seis etapas, con un desnivel acumulado de 7.519 metros; una jornada estrella con la única compañía del GPS y del sentido de la orientación; alta montaña, dunas y más dunas, desierto extremo, Marruecos... La descripción de la Gaes Titan Desert Garmin habla por sí sola. Una prueba que ejerce de imán para más de 600 valientes que quieren vivir desde hoy una experiencia que marcará sus vidas. Entre ellos, 13 aragoneses a los que no les asusta la aventura porque el fin es claro para todos: «Es un reto personal».

De los 612 participantes (de 24 nacionalidades; 70 son mujeres), algunos de ellos ya forman parte de la familia de la Titan después de haber participado en pasadas ediciones. Como Jorge Chico Fernández, que suma su tercera Titan africana en sus piernas, que se unen a la Titan Tropic de Cuba. El zaragozano forma parte del equipo TBelles Cannondale de Manresa, una escuadra profesional que en los últimos dos años ha logrado seis victorias de etapa y en dos ediciones consecutivas subir al podio por equipos. «¿Qué me mueve a participar? Primero, porque es una competición y queremos un resultado después de muchos kilómetros –de 4.000 a 5.000– de preparación y pruebas corridas; segundo, porque es el desierto, y te enfrentas a lo desconocido; tercero, porque vamos un grupo de personas y se genera un compañerismo muy especial, que lo hace muy bonito... Pero, osobre todo, porque es un acontecimiento únic», desarrolla Jorge Chico, pareja de la principal baza femenina en la Titan, la cubana Olga Echenique, afincada en Zaragoza y que fue tercera en 2017.

Jorge comparte su pasión en los entrenamientos con otros titanes aragoneses, como Roberto Arellano, Antonio Layús, Óscar Santander y José Ramón Margalejo, que ya están listos para abordar este domingo la primera etapa bucle (115 kilómetros cronometrados, con 2.651 metros de desnivel). «Para todo corredor, la Titan es una asignatura obligatoria en la universidad de la vida», asegura Margalejo, que ya ha probado las Desert y Tropic. Como sus compañeros, la carrera se convirtió en un empeño cuando supo de ella. Ciclista por afición, el físico juega un papel importante para salir con éxito de los obstáculos que presenta la cita: temperaturas extremas, frío, noches durmiendo en jaimas bereberes al abrigo de las estrellas... «Pero también la mente es vital, saber gestionar las emociones –especialmente cuando la arena te desborda y vas a ciegas–, no derrumbarte, porque la cabeza es la que guía las piernas», añade el zaragozano, integrante del Tamayo Team, donde también figura otro «loco» de la tierra, Óscar Chico Fernández, hermano de Jorge, y un hombre que estuvo muy vinculado a Zaragoza, el colombiano Diego Tamayo, vencedor en 2015.

En la gran familia de la Titan, además, figuran corredores que se enfrentarán al desierto de Marruecos por primera vez. Como Santiago Júdez, un ciclista amateur al que le convenció un amigo para correr la prueba por etapas «más épica del mundo». «A veces nos preguntamos si es un atrevimiento, pero una vez que te mentalizas, no te da ni tiempo de pensarlo. Llevo seis meses entrenando a tope. Suerte es lo que me va a hacer falta», apunta el zaragozano. Y, además de fortuna, que el cuerpo aguante. Es lo que espera Miguel Robres, al que unos problemas estomacales le impidieron acabar la pasada edición. «Me quiero sacar la espina. Llevo todo el año ahorrando para esto –es un presupuesto de 4.000 a 5.000 euros–, pero como nos gusta la bici merece la pena», asegura.

Pedaladas solidarias

La Titan Desert también es una cita comprometida. El hondureño-aragonés Milton Ramos llegó hace dos décadas a la Comunidad. Entre Zaragoza y Sabiñánigo, su actual residencia, el genial ‘biker’ está al frente de un hermoso proyecto. «Voy con un grupo de doce personas con un reto solidario y voy a ayudar a que terminen. Una empresa de Jaca, Bikefriendly Tours, es la que impulsa la iniciativa. El objetivo es recaudar fondos para Lucía, una niña de cinco años que sufre una enfermedad rara (encefalopatía epiléptica grave) y la adquisición de un aparato (bipedestador) que le ayude a que los dolores que sufre sean menores», explica Ramos, que acumula seis Titan Desert seguidas (2010-11-12-13-14-15) y cuatro podios.

Igualmente emotivo es el reto de Santi Izquierdo quien, con 22 años, se convirtió en el participante más joven, y primer aragonés, en la historia de la Titan. Ahora, con 26, y tras haber realizado numerosas competiciones en condiciones imaginables y muy duras, el zaragozano vuelve a participar en la Titan Desert junto al equipo Mercedes Benz de Stern Motor, con el objetivo de recoger fondos para la organización Asdent destinados a Nacho, un niño de ocho años de Barcelona diagnosticado de la enfermedad de Dent. «La madre, Eva, también viene a hacer la carrera, tiene esclerosis múltiple. Es impresionante su determinación. Otro corredor es diabético de alto grado... Vamos a intentar llegar todos a la meta», relata el deportista, que sigue fiel a su máxima: «Querer es poder. Yo encontré en las carreras mi afán de superación. Y la Titan es el mayor reto».

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión