Javier Magallón, deportista turolense de triatlón: "Con ilusión se puede llegar muy lejos, aun desde un sitio pequeño"

Las limitaciones en instalaciones deportivas de su Teruel natal no han frenado su imparable carrera en el mundo del triatlón, con múltiples triunfos.

Javier Magallón, de 21 años.
Javier Magallón, de 21 años.
Ana Almer

Primer turolense que logra –el pasado octubre– el premio al mejor deportista promesa en los 20 años de la Gala del Deporte Aragonés. Ni siquiera el exfutbolista también turolense Luis Milla lo consiguió.

Es un orgullo tener un premio tan importante. Pensaba que no lo conseguiría, hay gente muy buena en Aragón que no lo ha logrado. Además, siendo de Teruel, es un plus. Es más complicado entrenar por la falta de instalaciones y hay que buscarse la vida. Solo hay una piscina cubierta para toda la ciudad. Me siento muy satisfecho por mi trabajo. El premio me ha ayudado mucho para seguir entrenando.

Para hacerse con el galardón, además de buen deportista hay que ser popular –el público también vota–. ¿Qué le ha resultado más difícil?

Lógicamente, entrenar día a día. Hay veces que no te apetece y hay que sacar fuerzas de donde sea, porque la constancia es esencial. Pero es verdad que mi padre y yo tuvimos que emplearnos a fondo en mover el enlace digital entre las personas que me conocían para conseguir votos. No fue nada fácil. Al final, la gente se implicó bastante y le doy las gracias por ello.

Lo suyo es el triatlón –natación, bicicleta y carrera a pie–, un deporte muy duro. ¿Qué le atrajo de esta disciplina?

Desde pequeño me han gustado los retos y el triatlón era uno de ellos. Yo nadaba con el Club Natación Teruel, pero se me daba bien correr y otros triatletas me animaron a seguir sus pasos.

Hace tres años fue seleccionado para integrar uno de los equipos de triatlón más potentes de España, el de la Universidad de Alicante. Desde entonces está en Elche, entrenando con los mejores.

Sí, allí hay gente que se prepara para las olimpiadas de Tokio. Solo estamos dos españoles. El otro es cuarto del mundo en triatlón junior y subcampeón de España de élite. Hay alemanes, serbios, suecos, finlandeses... de toda Europa.

¿En qué idioma hablan entre ustedes?

En inglés, es la única forma de comunicarnos. Allí no te queda otra que aprender este idioma, por supervivencia. Me defiendo como puedo.

¿Se le quedó pequeño Teruel?

A ver, no es eso. Es que a veces tenía que nadar con mucha gente en la piscina climatizada y así era complicado entrenar. Además, en deporte tienes que ponerte el listón muy alto para mejorar y eso solo se consigue compitiendo con gente que te supera, si no, hay un déficit de motivación. Por eso estoy en Alicante. Quiero progresar. Entreno cinco horas diarias, que es bastante.

Mudarse de Teruel a Alicante habrá sido, salvando las distancias, como pasar del Polo Norte al Caribe.

Pues, sí. En Alicante hay un microclima que te permite hacer muchas más cosas. En Teruel tenía que entrenar muchas veces en bicicleta a temperaturas bajo cero y eso da mucha pereza. Aquí todo es cálido y eso me permite incluso prepararme para el triatlón en aguas abiertas, es decir en el mar.

¿Qué metas se ha propuesto?

Este año quiero intentar correr en alguna copa de Europa, mejorar mi puesto en el campeonato de España de élite y crecer en carrera a pie, que es donde, al final, se decide el triatlón.

¿Sigue de cerca el ‘boom’ del voleibol en Teruel, cuyo equipo, en la élite nacional se ha convertido en referente para la ciudad?

No como aficionado, pero sí como turolense. El equipo, uno de los mejores de España, es un orgullo para todos y sus triunfos promocionan Teruel. Es bueno que los deportistas de Teruel estén arriba.

Prueba de que desde una ciudad pequeña se puede llegar muy lejos.

Así es, con ilusión y constancia las cosas salen adelante aun desde un sitio pequeño. Lo importante es seguir entrenando, aunque las circunstancias no sean las mejores.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión