Urge reaccionar

Urge reaccionar. Después de cinco derrotas consecutivas, el Tecnyconta se ha desplomado en la clasificación. Y ahora se halla en una situación inquietante, de máximo riesgo, cuando restan cuatro partidos para alcanzar el ecuador de la Liga Endesa: una sola victoria separa al cuadro zaragozano de la última posición, cuando hoy, precisamente, comparece en la pista del Real Betis para medirse con el colista (19.00, Movistar+). Semanas atrás, parecía un duelo plácido para los aragoneses, que venían compitiendo con determinación y seguridad ante cualquier rival y en cualquier escenario. Además, su oponente presentaba un balance desalentador –diez derrotas en las diez primeras jornadas–, además de grandes desequilibrios en los dos lados de la pista.

Sin embargo, el panorama ha dado un vuelco inesperado, y el Real Betis acude este sábado a la cita convencido de sus posibilidades de triunfo. Y tiene argumentos suficientes para creer, después de haber protagonizado un importante crecimiento con el discurrir del campeonato. De hecho, aunque su primera victoria se demoró hasta la undécima jornada –en casa ante el Obradoiro (83-77)–, los sevillanos no conocen la derrota desde entonces, pese a afrontar sus dos siguientes encuentros lejos de su pista: superaron a domicilio al UCAM Murcia, tras remontar un marcador adverso de 13 puntos (63-70); y, en su actuación más reciente, derribaron todos los pronósticos en Gran Canaria, frente al poderoso Herbalife (83-90).

Tres victorias consecutivas, la última de ellas de rango mayor, que han alimentado la autoestima de los andaluces. Por el contrario, el Tecnyconta ha presentado una sorprendente involución. En sus compromisos más recientes, el cuadro aragonés ha sido un equipo voluble, inconstante e imprevisible, con una irregularidad manifiesta en los dos lados de la pista, y por momentos ha emitido sensaciones muy negativas en su juego. Sobre todo en las labores de contención, donde han faltado compromiso, tenacidad, intensidad y convicción: ha encajado 460 puntos en sus últimos cinco partidos, lo que se traduce en una media de 92 tantos por choque.

Al margen de sus desequilibrios defensivos, el Tecnyconta se topará, en los próximos encuentros, con otro obstáculo de envergadura en sus acciones de ataque: la ausencia de Gary Neal, con todo lo que conlleva. El escolta, de 33 años, sigue siendo la referencia más fiable de los zaragozanos en la faceta ofensiva. Se trata del tercer máximo anotador de la Liga Endesa, con un promedio de 17,3 puntos por partido. Únicamente Sylven Landesberg, del Movistar Estudiantes (18,3), y Tornike Shengelia, del Baskonia (17,5), ofrecen una mayor productividad en el presente ejercicio. Neal, además, es el jugador que más se prodiga desde la línea de personal (68 tiros libres en 13 partidos), y quien mejor porcentaje de acierto presenta desde la línea de 4,60: tres errores a lo largo del torneo, lo que representa un 95,5% de efectividad. Pero el americano no sólo factura puntos con suma facilidad, sino que, por su amplitud de recursos, es el mayor generador de juego de los zaragozanos (3,2 asistencias por partido). También se trata del jugador más utilizado por Jota Cuspinera, al permanecer en la pista una media de 28 minutos por duelo, y quien más faltas genera en sus adversarios (4 personales por choque).

Para suplir la ausencia de Neal, quien permanecerá al menos un mes de baja, el Tecnyconta ha contratado a Txemi Urtasun, quien debutará hoy a las órdenes de Jota Cuspinera tras haberse incorporado el pasado miércoles a los entrenamientos. Un buen recambio que, sin embargo, necesitará tiempo para alcanzar su verdadera dimensión. Mientras tanto, al cuadro aragonés le apremian las urgencias. Necesita reaccionar con la mayor prontitud, y más en la pista del colista, para no acentuar sus dudas y para evitar posibles sobresaltos en el futuro.