Siete claves por las que sí irás al gimnasio

Las clases en grupo, organizarse un 'timing' de ejercicios y pagar el gimnasio mes a mes son algunas de las acciones que pueden ayudarte a no abandonar los centros deportivos.

DreamFit Zaragoza.
DreamFit Zaragoza.
Camino Ivars

El objetivo de hacer ejercicio y ponerse en forma suele convertirse en una obligación difícil de cumplir para muchos. Aunque la llegada del año nuevo parece ser la época idónea para cerrar estas promesas, la vuelta a la rutina tras las vacaciones del verano (y para los zaragozanos, después de las Fiestas del Pilar) es otro de los momentos donde los gimnasios ven como su lista de usuarios aumenta. La euforia del principio y las ganas con las que se acude los primeros días suelen dejar, después, paso a la pereza. Para que ir a este lugar lleno de máquinas y de música no sea un hecho pasajero, estas siete claves te ayudarán a que se convierta en una sana rutina:

Clases en grupo: el gimnasio puede ser la excusa perfecta para socializar y pasar un buen rato con conocidos e incluso amigos. Así, hacer deporte acompañado es mucho más llevadero. Un gimnasio cerca de casa o del trabajo: apuntarse a un centro cercano es uno de los factores para que la pereza no se adueñe de las ganas de ponerse en forma.  Organizarse un horario: probar las clases más divertidas, como el crossfit,  o descubrir en qué periodo tienes tus máquinas preferidas más libres es fundamental para establecerse un horario después. Aunque al gimnasio puedas ir a cualquier hora, lo más recomendable es hacerse un 'timing' con las clases que prefieras. Así, las horas de gimnasio serán siempre las mismas, lo que permite organizar mejor la rutina.  Pagar el gimnasio mes por mes: la mayoría de centros permiten pagar todo el periodo de una vez, haciendo que el usuario se olvide una vez pagado. Práctico sí, pero la sensación de estar pagando algo mes a mes hará que seas consciente de que, si lo dejas, estás pagando por algo cada mes a lo que no acudes.  Objetivos realistas: nada de comparaciones con el resto de personas que circulan por las salas del gimnasio. Cada uno es un mundo y, por ello, la progresión de cada persona es diferente. Dejarse asesorar: en los centros deportivos trabajan profesionales con los que trabajar de forma conjunta para lograr esos objetivos. Anima a la agenda 'post-gimnasio': no todo va a ser sufrir. De vez en cuando, organiza algún plan social después del gimnasio. Una vez conscientes de la importancia de hacer ejercicio, hay que evitar estos 9 comportamientos en el gimnasio

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