Los Juegos de Barcelona ocupan las páginas doradas del álbum del deporte aragonés. La Comunidad batió su registro de participantes en una misma cita –con nueve– y de medallas conseguidas –con dos–. Dos récords que no se han superado 25 años después.

Corona la nómina Martín López Zubero, el hijo del exbaloncestista y prestigioso oftalmólogo zaragozano José Luis López Zubero. Pese a nacer y formarse en Estados Unidos, siempre hizo gala de sus orígenes familiares. Venció con suficiencia los 200 metros espalda, una de sus especialidades. El primer oro olímpico de todos los tiempos para la natación aragonesa y española. Acarició el bronce en los 100 metros espalda, donde concluyó cuarto.

Un escalón más abajo en el podio le correspondió a Conchita Martínez. La montisonense conformó una temible pareja junto a Arantxa Sánchez Vicario. Fueron superando rondas en dobles hasta clasificarse para la final, donde cayeron ante las estadounidenses Mary Joe Fernández y Gigi Fernández. Pero esa plata les supo a oro. Cuatro años después, Conchita se colgó un bronce en la misma especialidad en los Juegos de Atlanta haciendo de nuevo equipo con la tenista catalana.

No todo fueron alegrías para la expedición aragonesa. Especialmente decepcionante fue la experiencia para los zaragozanos Juan Antonio San Epifanio y Pepe Arcega. Sus ganas de llevar a España lo más lejos posible en el baloncesto, se vieron frustradas en la pista, con derrotas tan amargas como ante Angola. Al menos, tuvieron el privilegio de enfrentarse al genuino Dream Team de Jordan, Bird y Magic.

Esther Lahoz y Álvaro Burrell (atletismo), Fernando Bolea (balonmano), Gema Usieto (tiro), José María Martínez (piragüismo) también disfrutaron de la experiencia olímpica.