Un zaragozano correrá la Quebrantahuesos con una bicicleta de madera

Javier Sebastián, fundador de una empresa de muebles en El Burgo de Ebro, diseñó y fabricó hace tres años un prototipo de bicicleta único, "más estable y con más aplomo" que una de carbono. Ya ha subido el Tourmalet o el Col d'Aubisque.

Javier Sebastián, con su bicicleta de madera en el Col d'Aubisque.
Javier Sebastián, con su bicicleta de madera en el Col d'Aubisque.
Heraldo.es

Javier Sebastián siempre ha estado ligado a la madera. En 1993, el zaragozano fundó en El Burgo de Ebro una empresa familiar de muebles que todavía sigue siendo hoy una de las grandes referencias de la zona. Hace algo más de tres años, adquirió para su taller artesanal un potente software de diseño 3D, un gran avance tecnológico con el que pretendía modernizar su negocio. Estudió a fondo el sistema junto a su hermano José Ignacio (también trabajador de la empresa), sopesó sus usos más allá de lo meramente laboral y decidió probar a unir dos de sus grandes pasiones: la madera y el ciclismo.

Aficionado desde siempre a dar pedales, Javier diseñó un primer prototipo de bicicleta de madera. "Me gusta mucho el ciclismo, soy aficionado desde siempre y decidí probar, como experimento, con un primer modelo", recuerda. "Una vez que la terminamos, le pusimos las ruedas y los diferentes sistemas de cadenas y cambios y me di una vuelta. La sorpresa fue mayúscula. El comportamiento era excelente. Y, al ver que era algo muy potente, enseguida pensé en hacer otra mejor. Más completa”, agrega. Javier eligió un tipo de madera mejor, un barniz más profesional y un pegamento que se utiliza, por ejemplo, en los barcos y en las piraguas de competición. "Diseñamos un bicicleta para andar con ella de verdad", subraya.

Dicho y hecho. Javier creó una bicicleta de ensueño. Según él, con un comportamiento "muchísimo mejor" que una de fibra de carbono. Pero no una cualquiera. "Mi otra bicicleta es una réplica de la que utilizó el equipo Cofidis hace dos años en el Tour de Francia. Es una grandísima bicicleta, no cabe duda. Pero la estabilidad y el aplomo es mucho mejor en la de madera", explica. "En marcha va muy bien. Es estable y rígida. La madera es el material más versátil que tenemos en la tierra. El único problema es que es muy laborioso de trabajar y que pesa un poco más, pero esta bicicleta está pulida al milímetro", incide.

Con ella ha subido el Tourmalet o el Col d’Aubisque y ha participado en carreras como la Luchon-Bayonne o la Rompepiernas. "La gente se sorprende cuando me ve llegar a las carreras. Saben que existen las bicicletas de madera, pero nunca han visto una. Además, es muy bonita".

Su próximo reto es la Quebrantahuesos de este sábado. Será su décima participación en la mítica prueba (Javier cumple 50 años dentro de 10 días) y la segunda con la bici de madera. Competirá junto a su grupo de amigos del Club Ciclista de Fuentes de Ebro y tiene entre ceja y ceja terminar los 200 durísimos kilómetros del recorrido en unas 7 horas. "Llego en buena forma, conozco bien el recorrido y estoy capacitado para ello. Si no son 7 horas, espero que sean 7 horas y media máximo", concluye ambicioso el aragonés.

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