La Escuela Ciclista Zaragoza se enfunda el maillot

Después de varias temporadas bajo la tutela de diferentes entidades, la Escuela Ciclista de Zaragoza decidió embarcarse en un ambicioso proyecto en el año 2012. Ayer, en el Patio de la Infanta de Ibercaja, el club subió el telón a su quinta  campaña con la puesta de largo de todos sus equipos. Cuatro plantillas que reúnen a un centenar de ciclistas de diferentes edades, pero que comparten una característica común: su pasión por la bicicleta. Este curso destaca, además, el relevo en la presidencia de la Escuela Ciclista, donde José Manuel Agustín sustituye al anterior responsable, Sergio Larrosa.

"Fundamentalmente nuestra escuela está compuesta por niños, por lo que nuestro máximo objetivo es que aprendan y, sobre todo, que se diviertan", explicaba el nuevo máximo mandatario. 55 niños y niñas forman parte de las categorías inferiores, cuyo director técnico es Enrique Herrero. Junto a él, Chema Pérez y Alfonso Bea trabajan en la formación de los más pequeños. Un colectivo al que una temporada más continúa dando nombre el corredor Ángel Vicioso. A pesar de no poder estar presente en el acto de ayer, ya que se encuentra compitiendo con el Katusha-alpecin en la Vuelta al País Vasco, el de Alhama de Aragón envió sus mejores deseos a los jóvenes ciclistas a través de un vídeo.

"Estamos muy agradecidos a Ángel Vicioso. Para nosotros es lo mejor que nos ha podido ocurrir. Nosotros contamos con él, y él con nosotros. A las dos partes nos va muy bien y eso es lo más importante", indicaba Agustín.

Además de los deportistas de la escuela, el equipo cuenta en sus filas con 19 ciclistas en edad cadete, dirigidos por Pablo Carabantes y David Marco. Los 11 corredores júnior compiten bajo la supervisión de René Galindo, mientras que los ocho deportistas sub 23 y los siete en la máxima categoría amateur  ciclista hacen lo propio con Adrián Barceló, José María Barceló y Eduardo Pérez. Por segundo año consecutivo destaca la presencia de este equipo de élite, cuya sede está ubicada en Huesca.

"Lo que pretendíamos es que una vez que llegan a categoría júnior pudieran seguir compitiendo. El equipo de élite y sub 23 es el más visible, y el que más carreras corre por España. Los que llegan allí pueden dar, incluso, el salto a profesionales", matiza el presidente de la entidad.

Dedicación plena al ciclismo

La filosofía de la escuela parte de inculcar los valores asociados a este deporte posibilitando el crecimiento de los jóvenes como deportistas y acompañándolos en su crecimiento personal. Además de los entrenadores, el club cuenta con la colaboración de varios especialistas en diferentes facetas que complementan la formación de los ciclistas.

"Nuestra filosofía es clara, sobre todo entre los más pequeños. No hay nigún espíritu competitivo, ninguna estrategia, ni ninguna exigencia clasificatoria. Lo único que se les pide es que cojan habilidad con la bicicleta, pero sobre todo que se diviertan", concluye José Manuel Agustín.