El combinado aragonés sub 18 acaricia el pase a la gran final del Campeonato de España de Selecciones Autonómicas –que solo lo disputan las cuatro mejores selecciones de las 19 que participan en esta competición organizada por la RFEF– tras el triunfo de ayer ante Baleares (2-1). Los aragoneses partían con seis puntos de la primera fase tras vencer a País Vasco (1-0) y Asturias (2-0). Una victoria mañana en el estadio Pedro Sancho de Zaragoza ante el combinado de Castilla y León (12.30) metería matemáticamente a Aragón sub 18 en una nueva final con doce puntos. En 2014, con Javier Garcés en el banquillo y Vallejo como capitán, esta selección ya disputó una fase final.

El encuentro ante Baleares no arrancó nada bien para los juveniles, ya que comenzaron perdiendo muy pronto. En el minuto 10, Martí remataba un centro medido con la cabeza dentro de la red de la portería defendida por el zaragocista Azón. Aragón se repondría de este golpe temprano poco después y tras una gran acción combinativa, Carlos Vicente realiza un pase preciso dentro del área balear, que Diego Martínez le devolvió de espuela para que Carlos empatase el partido en medio del delirio de los jugadores aragoneses tras batir al cancerbero insular.

Tras el empate de Carlos Vicente, el combinado de Miguel Sevil tomó la batuta del encuentro, y, a pesar de jugar en contra del viento, no dejaba ninguna fisura en el bloque defensivo que hiciera pensar en alguna acción de peligro sobre el portal aragonés.

Con el empate a un tanto se llegó al descanso. A los siete minutos de la reanudación, Forcén se internó dentro del área y fue derribado por un defensor cometiendo una clara pena máxima que fue lanzada por el defensor zurdo Clemente al fondo de las mallas adelantando a Aragón (1-2).

Con la victoria parcial en el marcador, Aragón continuó manejando el partido a su antojo. En los últimos instantes, Baleares intentó la igualada, ya que al igual que su rival partía antes del partido con un bagaje de seis puntos y muchas opciones de seguir adelante, pero la sobriedad y el trabajo defensivo de los aragoneses lograron atar el triunfo.

Los cadetes, apeados

El combinado cadete, que dirige Aitor Pardo, no pasó del empate a cero ante Baleares a pesar de gozar de hasta cinco ocasiones claras para adelantarse en el marcador, estrellando el balón dos veces en los postes. El cuadro cadete partía con cuatro puntos de la primera fase y debía ganar los dos enfrentamientos de esta segunda para tener opciones de clasificarse para la lucha por el título, dependiendo de lo que ocurriese en otras sedes. Los cadetes jugarán de nuevo mañana, a las 10.30, en un partido de puro trámite ante el combinado de Castilla y León.