Kraljevic se suma a la causa. El pívot, que viene desempeñando un papel residual, se ha propuesta adquirir un mayor protagonismo en los próximos partidos, una vez superado su arduo y laborioso periodo de adaptación. Se trata de su primera experiencia fuera de su país, lo que ha retrasado aún más una aclimatación que, de momento, mantiene al jugador todavía muy lejos de su verdadera medida. "Sé que puedo ayudar más al equipo", anuncia el croata, consciente de que necesita elevar sus prestaciones con inmediatez. Y el pasado domingo, ante el Iberostar Tenerife, ya evidenció una notable mejoría con respecto a anteriores actuaciones: facturó cinco puntos, sin un solo fallo en sus lanzamientos, en los cinco minutos que se mantuvo sobre la pista. Pero más allá de las estadísticas, Kraljevic se empleó con contundencia atrás y cerró con firmeza el juego interior de los zaragozanos.

Precisamente, esa es su labor: ser un muro sólido y resistente, prácticamente inabordable, en las labores de contención. El pívot, de 2,12 metros de estatura, fue contratado para aportar consistencia y envergadura bajo los aros. Su función pasa por ser un defensor aguerrido y solvente, muy difícil de superar, que ejerza un importante poder de intimidación en sus adversarios. Que rebotee, que tapone y que modifique los tiros del rival. Sin embargo, el croata había exhibido una fragilidad sorprendente durante la pretemporada, y su apatía le ha condenado a un papel muy secundario en el tramo inicial de la competición: 73 minutos en los 10 primeros partidos de la Liga Endesa.

Contra el Valencia, en la jornada inaugural, y frente al Obradoiro, en el séptimo duelo oficial de los zaragozanos, ni siquiera participó. "Cuando dispones de minutos en la pista, está claro que te sientes mucho mejor, con más confianza. Y voy a trabajar mucho para ello", advierte el pívot, quien insiste en su intención de "ayudar al equipo en todo lo posible para seguir sumando victorias". En este sentido, recuerda la importancia "del trabajo colectivo".

Klaljevic, cada vez más cerca de su mejor versión, no sólo firmó un buen partido contra el Tenerife. Su mejor actuación se produjo ante el Murcia, en la cuarta jornada, cuando contribuyó al triunfo de los aragoneses 9 puntos, 6 rebotes, 1 asistencia y 2 robos de balón en sólo un cuarto de hora. Alcanzó los 15 de valoración. Es la línea a seguir.