El Huesca aprende a sufrir

Los oscenses le han dado la vuelta a marcadores adversos hasta en cinco ocasiones en lo que llevamos de temporada, algo que se le
resistía el pasado curso.

Melero se lamenta tras su ocasión enviada al larguero, este domingo en Tenerife.
El Huesca aprende a sufrir
juan garcía cruz/acan

‘Fieles siempre sin reblar’ es la máxima que acompaña al conjunto oscense y parece que este año Anquela ha conseguido tatuar en sus hombres ese mantra del club, logrando convertir en filosofía ese ‘no rendirse nunca’. La pasada semana el conjunto azulgrana dio dos claros ejemplos de ello, en sus encuentros contra Las Palmas y Tenerife, en los que consiguió puntuar pese a verse por detrás en el marcador. Una fortaleza mental que costó forjar el pasado curso, pero que este año el Huesca ha demostrado tener hasta en cinco ocasiones.


En dos de ellas, la remontada fue total, logrando sumar los tres puntos. La más valiosa quizás la que logró el Huesca ante el Valladolid, ya que se consiguió a domicilio. Camacho en el minuto 66 y Samu Sáiz diez minutos después desde el punto de penalti lograron neutralizar el tanto que había conseguido De Tomás en el 52 y que parecía poner las cosas de cara para los locales.


Al margen del tema físico y la capacidad en el aspecto meramente deportivo, la entereza mental se convierte en clave para afrontar estas situaciones, y es algo en lo que Anquela ha logrado calar en sus hombres.


También El Alcoraz sabe lo que es vivir la intensidad de una remontada, ya que contra el Reus se le dio en solo dos minutos la vuelta a un encuentro que se había puesto muy cuesta arriba en los minutos iniciales, cuando Mayor había dado la ventaja a los catalanes en el minuto 16. Nuevamente un penalti transformado por Samu en el 72 y Melero en el 74 consumaron el logro.


Contrastan estos dos triunfos conseguidos desde la adversidad con la trayectoria del pasado curso, cuando no fue hasta el mes de mayo cuando el Huesca pudo voltear un resultado en contra. Fue contra el Almería, en un momento clave de la temporada, ya que ambos conjuntos se jugaban el caer en puestos de descenso. Un tanto en contra en la primera parte, una arenga de Leo Franco en el descanso y la reacción mediante Tyronne y Alexander componen el guión de aquel inusual encuentro dentro de la dinámica que había seguido el conjunto en el resto de la campaña.


Reponerse para arañar un punto sí que es algo que los oscenses supieron hacer en varias ocasiones durante el curso anterior, y que en el presente ya han hecho en tres ocasiones: dos en liga y una en Copa del Rey, frente a la UD Las Palmas.


Habla muchas veces Anquela de "algo de fortuna" como una de las claves en el devenir de los encuentros, y quizás fue lo que faltó en los empates que logró su equipo frente al Rayo Vallecano, Tenerife (el pasado domingo)y el ya citado frente a la UD Las Palmas. En todos ellos, los de Anquela acabaron errando acciones claras en el tramo final que hubieran supuesto la victoria.


De especial mérito fue el 2-2 logrado por el Huesca en Vallecas, ya que los oscenses se quedaron en inferioridad tras la expulsión de Brezancic, y pese a ellos supieron reponerse y empatar el encuentro con un jugador menos.


Contra los dos conjuntos canarios a los que se han enfrentado los oscenses esta semana, el sentir del vestuario tras los empates era "agridulce", ya que quedó la sensación de que se había dejado escapar vivo a un rival al que se tuvo arrinconado.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión