Álvaro Vadillo: "No puedes dar importancia a la clasificación ahora. Esto es muy largo"

¿A quién le dedicó el gol?

A mis padres, que tuve la suerte de que me estaban acompañando en el partido porque habían venido de Cádiz la semana pasada. Y también a mi novia, que es la que me aguanta todos los días.

Su segundo tanto ya con la camiseta de la SD Huesca.

Es la primera vez que marco dos goles en la misma temporada y estoy muy contento. Creo que es fruto de la confianza, de sentirte importante dentro de un vestuario y esperemos que siga la racha y sirva sobre todo para ayudar al equipo a conseguir más victorias.

En su presentación dijo que venía a divertirse otra vez con el fútbol después de dos años casi inédito por las lesiones. ¿Se lo está pasando bien en el Huesca?

A lo mejor todavía no lo transmito en el campo, pero me estoy divirtiendo. Estoy disfrutando y sobre todo cuando las cosas salen, mucho más. De hecho, no jugaba cuatro partidos seguidos de titular desde la 2013/2014. Tres años que no he estado disfrutado de lo mío y ahora gracias al trabajo y a la confianza que están depositando en mí, puedo disfrutar de más minutos y de mi profesión.

¿Anquela deja a los jugadores divertirse? Porque desde fuera parece que tiene mucho carácter...

Sí, es un entrenador exigente y a los extremos nos pide sobre todo que ayudemos a nuestro lateral y que seamos un equipo muy junto. Pero sí que deja que nos divirtamos, porque cuando cogemos el balón de tres cuartos para adelante nos da total libertad y deja jugar a cada uno a su estilo.

El sábado, tras la victoria contra el Mirandés, le elogió sobre todo por su trabajo defensivo.

Es lo que más me recalca, que tenemos que trabajar todos juntos porque solo así podemos conseguir victorias. El otro día el equipo hizo un trabajo defensivo increíble pero también disfrutamos con el balón y conseguimos un contundente 3-0.

Anquela dijo que había que mimarle mucho y que entraría poco a poco, pero ya lleva cuatro partidos seguidos de titular. ¿Se ve ya asentado en el once?

La plantilla es muy amplia y competitiva. El que no sale de inicio también aporta y por eso no te puedes ver ni titular ni suplente.

El equipo ha empezado la liga con buenas sensaciones, especialmente en El Alcoraz. Ahora hay que conseguir regularidad.

Sí, en nuestra casa estamos haciendo las cosas bastante bien, pero si luego podemos puntuar también fuera, mucho mejor.

La afición casi se frota los ojos al ver al equipo con 14 puntos y en el noveno puesto de la tabla, rozando incluso el ‘play off’. ¿Hay que darle importancia a la clasificación en la jornada 10?

Para nada. Ya he tenido la suerte de jugar en Segunda y sabes que esto es muy largo y que cuando pierdes dos partidos, como nos pasó hace unas semanas, estás casi en descenso, y si los ganas, estás casi en ‘play off’. La cosa está muy apretada y se mantiene así todo el año. Debemos seguir pensando solo partido a partido y en intentar hacerlo lo mejor posible en el siguiente.

Y hablando de aficiones otra vez. ¿Ha notado mucho cambio después de competir ante una tan caliente como la del Betis?

Ya solo la capacidad del campo es muy diferente porque en el campo del Betis se metían 30.000 personas. Pero aquí también te arropan y sientes el cariño. De hecho, el otro día, al acabar el partido, lo estuve hablando con mis padres y les dije que estoy muy a gusto por cómo están yendo las cosas, pero siendo consciente de que toda la temporada no va a ser así y que tendré que estar preparado para cuando haya altibajos.

¿Qué aprendió en los dos años que prácticamente estuvo en el dique seco por las lesiones?

Sobre todo a valorar. Cuando estás fuera del vestuario o no te sientes partícipe ni de las victorias ni de las derrotas, cuando estás aislado por la lesión e incluso apartado, como estuve la temporada pasada, aprendes a valorar tu profesión. Te das cuenta de que hay muchísima gente que le encantaría estar en tu lugar y le das importancia a cualquier detalle como el simple hecho de ir a una concentración, de hacer un calentamiento... Cosas que cuando estás metido en un vestuario o en una rutina no valoras.

Ha sido el futbolista más joven del Betis en debutar en Primera con solo 16 años. Visto todo lo que ha pasado luego, ¿le llegó demasiado pronto la oportunidad de cumplir su sueño?

Es verdad que ahora sería ventajista decir si fue bueno o malo, pero pensándolo sinceramente, sí. A los canteranos en el Betis se les exige bastante más y con 16 años fue difícil llevar esa presión. Y de hecho yo no la asimilé bien porque me acabé rompiendo la rodilla. Luego me costó entrar. No obstante, las cosas sucedieron así y yo también tengo parte de culpa de que mi carrera no haya ido como yo quería, pero al final eso ya queda en el pasado.

¿Su objetivo ahora es que la SD Huesca sea un trampolín para poder relanzar su carrera?

Lo dije el día que llegué aquí. Solo busco disfrutar y tranquilidad. He vivido cinco años en el Betis con la presión de haber debutado con 16. La gente espera mucho de ti y aunque a mí eso me gusta, porque significa también que confían bastante en mí, al final es una carga que he llevado durante muchos años y muchos partidos y he venido aquí a disfrutar de la tranquilidad, del fútbol y de cada entrenamiento, y que suceda lo que tenga que suceder. Yo me estoy marcando mi reto semana a semana, partido a partido y ahora mismo no pienso en lo que pase a largo plazo.