Se acabaron las vacaciones. El CAI Zaragoza arrancó ayer una nueva pretemporada con el técnico Andreu Casadevall en el banquillo. El conjunto zaragozano inicia una fase que contará con un total de seis semanas de preparación, en la que se pretende que los jugadores alcancen un nivel óptimo de cara al comienzo de la competición, además de empezar a adquirir las primeras consignas técnicas y tácticas del preparador catalán.

Los próximos días jugará un papel fundamental el preparador físico del club, Isaac López, que será el encargado de que los jugadores de Casadevall adquieran un buen tono físico. Además, el CAI realizará durante el mes de septiembre su tradicional semana de concentración. Será en el Pirineo aragonés, concretamente en la localidad de Benasque. "Tenemos por delante seis semanas para poder preparar bien al equipo. Tenemos un inicio francamente duro y lo que pretendemos es que de este grupo de jugadores podamos formar un bloque que resulte competitivo", aseguró el entrenador.

Con la llegada del escolta Martynas Gecevicius, a finales de la pasada semana, el equipo aragonés dio por cerrada su plantilla. De esta forma, el técnico podrá contar durante las jornadas con todo el bloque para preparar el primer partido de liga, que se disputará el primer fin de semana de octubre, contra Valencia Basket, en el pabellón Príncipe Felipe. El único ausente en la primera sesión de ayer fue el internacional alemán, Robin Benzing, que se encuentra disputando el Preeuropeo con su selección.

Una vez que el germano regrese de su compromiso internacional, Casadevall podrá disponer de todo el equipo al completo. "Empezar la pretemporada con la plantilla prácticamente cerrada te permite poder organizar mejor toda la preparación. Estas semanas nos van a ayudar a ir conociendo mejor a los jugadores. Mi trabajo ahora va a consistir en adaptar y modificar sistemas para que ellos se encuentren lo mejor posible sobre la pista y podamos competir al máximo nivel", explicó ayer el preparador.

Plantilla renovada

El CAI Zaragoza ha ejecutado un total de doce operaciones este verano para la confección de su plantilla: siete salidas –Sek Henry, Joan Sastre, Linhart, Romera, Kravtsov y Pere Tomás– y cinco incorporaciones –Holt, Kraljevic, Barreiro, Servera y Gecevicius–. Junto con los siete jugadores que continúan del curso pasado –Jelovac, Sergi García, Isaac Fotu, Tomás Bellas, Benzing, Norel y García– la nómina de jugadores asciende hasta la docena.

"Más de la mitad del equipo de la campaña anterior continúa, por lo que ahora debemos esperar que los componentes de la temporada pasada puedan seguir creciendo y que los que vienen nuevos se adapten cuanto antes. Los nombres no hacen los equipos. Los equipos los hacen los jugadores en base a su trabajo diario", advirtió el técnico.

Casadevall se marca el objetivo de ir "partido a partido" en una temporada que estará marcada por la importante reducción presupuestaria que ha sufrido la entidad. "Vamos a intentar estar lo más arriba posible, tratar de competir al máximo, pero tenemos que ser conscientes de que estamos en una liga dura y complicada en la que todos los equipos se han reforzado. Afrontamos la temporada con la mayor ilusión posible", concluyó el catalán.