Una semana más, Juan Antonio Anquela vuelve a lanzar un mensaje claro a sus jugadores: hay que dejarse de florituras en muchos momentos del partido y ponerse más veces el mono de trabajo siendo un equipo más intenso, más sacrificado y más competitivo, tal y como sí hicieron en la victoria hace dos semanas en casa ante el Albacete (3-1). "Jugamos bien al fútbol, que es lo más difícil, pero nos falta más de la cara B, el otro fútbol. Hay que pelear, morder y competir", dijo.

El técnico de la SD Huesca dedicó ayer todo el entrenamiento a dar una exhaustiva lección de táctica defensiva a sus jugadores, tanto con el balón en juego como en las jugadas de estrategia. Y es que no quiere que se vuelvan a repetir errores como el que les costó el gol del Tenerife en un saque de esquina mal defendido.

Los números –13 partidos seguidos encajando goles– demuestran que esta es la faceta en la que más cojea el equipo, que continúa pecando de falta de solidez, lo que le ha obligado a tener que remar a contracorriente en 10 de esos 13 últimos partidos.

Anquela quiere evitar que los jugadores se "obsesionen" con el lastre que supone no saber cómo dejar la portería a cero, algo que no ocurre desde el 31 de octubre en la victoria por 2-0 ante el Numancia en El Alcoraz. Pero insiste en que su máxima aspiración es, "con paciencia y tranquilidad", llegar a ser un equipo sólido "que conceda poco" y que ataque igual que hasta ahora porque, recordó, de los nueve partidos que lleva en el banquillo solo se han quedado sin marcar en dos (Alavés y Osasuna).

Para ello, dejó claro que el trabajo comienza en la delantera "porque hay que empezar a defender desde arriba, apretar, colocarse rápido e ir a cada acción con intensidad". En este sentido, señaló que otro de los mensajes que repite a sus jugadores es que "cada balón puede ser el del partido y si tú bajas o te equivocas un segundo, posiblemente tengas que ir a remolque".

Aprender de Tenerife

Anquela puso como ejemplo el último partido contra el Tenerife. "No podemos permitirnos el lujo de despistarnos y de no ser un equipo intenso porque nos pasó en Tenerife en la primera parte y por poco nos cuesta bien caro. No hubo actitud, no fuimos a los balones divididos y no competimos. Tuvimos suerte de que el partido no acabase en esos 45 minutos porque el rival tampoco tuvo muchas ocasiones", destacó.

Valoró mucho que una vez más el equipo luchó hasta el final y consiguió el empate en el minuto 88, y sobre todo la buena imagen que dio en la segunda parte, donde avasalló al conjunto canario. No obstante, sostiene que no pueden dar esos "bandazos" si no que tienen que ser "más regulares compitiendo porque si no en Segunda estás muerto ya que aun haciéndolo se sufre".

Anquela sabe que un alto porcentaje para conseguir una victoria el domingo depende de mantener la portería a cero "porque meter dos goles para ganar no está al alcance de muchos ya que en Segunda todos los equipos se basan en la solidez defensiva".

El técnico de la SD Huesca no se fía en absoluto de la posición que ocupa el Girona en la clasificación (es 10º con 30 puntos, solo 4 más que los oscenses) "porque el año pasado estuvieron a punto de subir a Primera, se han reforzado muy bien, juegan de memoria y tienen muchos argumentos para ganar un partido".

Defensa de cuatro o de cinco

Anquela no dio pistas ni en la rueda de prensa ni en el entrenamiento posterior –donde ensayó con defensa de cuatro y con tres centrales y dos carrileros en dos equipos en los que estaban mezclados los titulares y los suplentes– sobre si volverá a repetir once por tercera semana consecutiva. "No lo sé, intentaremos elegir a los mejores y equivocarnos lo menos posible", señaló.

Sí dejó entrever es que el lateral derecho Nagore, único refuerzo del mercado invernal que no ha debutado y que fue repescado del paro, podría tener que esperar alguna semana más. "Tenemos que ir con tranquilidad con alguno porque lleva mucho tiempo sin competir", dijo. Y volvió a felicitar al club por las incorporaciones que ha hecho "porque ha acertado plenamente".

El técnico también quiso resaltar el papel de revulsivos de algunos jugadores "porque en el último partido sí que nos dieron muchísimo", en referencia a Samu, Tyronne y Álex. Y también dejó claro que siempre les insiste a los que gozan de menos minutos que "para mí un futbolista es tan importante jugando un minuto que 89. Porque es un trabajo colectivo que uno empieza y otro lo remata, y a veces con dos minutos de puede hacer más que con 88".