"Aragón es hoy una región muy atractiva para el cicloturismo"

Como presidente, me siento muy orgulloso y contento de ser parte de este club, al que ya hace 20 años que pertenezco. Hemos desarrollado una labor que va más allá de las salidas en bicicleta, como la preparación de las pruebas ciclistas a muchos deportistas, actividades con la Asociación de Enfermedades Raras de Aragón, charlas sobre seguridad, mecánica y salud... Además, contamos con socios que nos facilitan el trabajo y que hacen de esta agrupación un ente social muy importante para promover el cicloturismo, dentro de unas líneas de actuación más amplias.

¿Qué supuso para ustedes el ser nombrados Entidad de Interés Público Municipal?

Un enorme agradecimiento a Zaragoza por haber reconocido desde el primer momento toda la labor que desarrollamos a nivel deportivo y social. Para nosotros, aquella distinción fue una enorme alegría e, insisto, un reconocimiento al trabajo del club.

Ya hace más de diez años que no organizan la Cicloturista Campo de Leciñena. ¿La echan de menos en el club?

Así es, la última fue en 2004, y lo que hacemos ahora es conmemorar la ruta en el mes de septiembre, cuando solía realizarse, con una salida oficial de los 152 miembros del club por el mismo recorrido, acabando en la localidad de Leciñena.

No obstante, el cicloturismo sigue siendo un pilar fundamental en la actividad que ustedes llevan a cabo.

En efecto, organizamos muchas salidas cicloturistas, no solo de carácter oficial para los inscritos en el club, sino también abiertas a los simpatizantes y aficionados de todo Aragón. En lo que llevamos de año, hemos conseguido realizar dos en la provincia de Zaragoza, dos en la de Teruel y cuatro en Huesca. Siempre lo hacemos a partir del mes de abril, y solemos colaborar con otros clubes y con la propia Federación Aragonesa de Ciclismo.

Ustedes ofrecen muchas charlas abiertas a los deportistas de manera periódica. ¿Qué mensajes cree que conviene transmitir en el ciclismo?

En realidad, damos charlas enfocadas a varios temas: seguridad vial, salud y ciclismo, primeros auxilios... Todo ello lo englobamos a lo largo del año dentro de la promoción del mundo de la bicicleta hacia la sociedad, aunque, en resumen, lo primero que intentamos es concienciar y mandar un mensaje de convivencia coordinada entre los ciclistas, los conductores y los peatones.

¿Ha crecido la afición entre los aragoneses por esta modalidad del ciclismo en comparación con la que había hace 30 años?

Sí, sin ninguna duda. Nuestro club crece en número de socios cada año, pero también vemos que hay más cicloturistas por la carretera, en zonas de montaña, etcétera. En general, hay mucha más práctica.

¿Cuál ha sido la importancia de iconos como Alberto Contador en este aumento de los aficionados a la bicicleta?

Total, y, en cuanto al cicloturismo, diría que comenzó en la época de Perico Delgado y en los años de Miguel Induráin.

¿Qué virtudes tiene Aragón para practicar el cicloturismo?

Aragón se ha convertido en una región muy atractiva para los aficionados al cicloturismo. Tenemos rutas reconocidas a nivel nacional y se nos identifica como una tierra que lo apoya.

¿Es más una práctica deportiva que cultural?

Yo lo he vivido siempre desde la perspectiva de la competición, pero me parece una gran experiencia descubrir en bicicleta el paisaje, las rutas, la gastronomía, los pueblos...

¿Cuáles son los motivos por los que la gente se suma a salidas cicloturistas?

Sobre todo, que es una actividad que reúne compañerismo, solidaridad, amistad y deporte en grupo. Cuando uno tiene una avería, los demás paran, colaboran y ayudan. Estos valores son los que hacen más rico al cicloturismo. Hace treinta años, se tendía a ser más competitivo en las salidas, pero hoy el espíritu ha cambiado.

¿Qué le pide el presidente del Club Ciclista Actur a los próximos 30 años?

Seguir en la misma línea, haciendo al club más grande de lo que hasta ahora lo hemos hecho, sin ponernos límites y con afán de servicio deportivo, social y, especialmente, cicloturista.