La montaña hacia Madrid, aliada de Purito si la crono lo permite

El ciclista ha dejado entrever que sí cuenta con aprovechar las tres etapas de montaña camino de Madrid en el tramo final de la Vuelta a España.

Joaquim 'Purito' Rodríguez se enfundó el maillot rojo de líder en Ermita del Alba con una sonrisa agridulce.
Joaquim 'Purito' Rodríguez.
Efe

"Si pierdo mañana dos minutos tendréis que escribir bastantes páginas", ha espetado este martes a los periodistas Joaquim Rodríguez, líder de la Vuelta, un poco más animado que en los últimos días de cara una crono de mañana en Burgos, menos hostil para sus intereses de lo que esperaba.


En esa frase, ante unos reporteros ávidos de recoger el guante, Purito dejaba entrever que sí cuenta con aprovechar las tres etapas de montaña camino de Madrid que sucederán a la ciudad del Cid en el tramo final de la Vuelta a España.


Algo que jornadas anteriores descartaba categóricamente: "el que salga líder de Burgos ganará esta Vuelta", decía. Hoy ya no era tan rotundo.

No ha querido cuantificar cuántos y hasta ha restado trascendencia a las sorpresas que le ha deparado el recorrido de la contrarreloj al reconocerlo -los repechos iniciales y la subida al Castillo- pero seguro que en sus cálculos habrá descontado algunos de los segundos que esperaba perder ante Tom Dumoulin.


Eso le ha hecho pensar en que sí, que las montañas de los últimos días sí pueden ayudarle en una de las últimas, sino la última, oportunidad que se le presenta de añadir una grande a un palmarés ya bastante estimable.

Porque etapas como la que finaliza este jueves en Riaza o la de este viernes en Ávila no deberían ser desdeñadas por un corredor como él, con latigazo cuesta arriba y cierta punta de velocidad en llegadas en grupos selectos y reducidos. Ni tampoco las bonificaciones que se reparten en ellas.


¿Quién no piensa que en su actual estado de forma, de los mejores que se le recuerda, Purito no pueda rascar un puñado de segundos en las cuestas que conducen hacia las murallas de Ávila?


¿O quien no se jugaría poner la guinda a una carrera ya brillante con un ataque furibundo en el Puerto de la Quesera (Primera/10 kms. al 5,5 por ciento de desnivel y los tramos más duros en la segunda mitad de la subida) para lograr unos segundos en la cima que luego aguantar en el descenso de 13 kms. hasta Riaza?


E incluso este sábado, ¿no son motivo suficiente otros cuatro puertos de Primera (Navacerrada, dos ascensiones a La Morcuera y Cotos) para animarse a 'liarla' antes del último descenso de 11 kms. hasta Cercedilla?

Esas preguntas probablemente se habrá hecho ya un Purito que, aunque la mantiene como cita clave, ya no ve tan claro que Burgos sea el fin de trayecto de la carrera. La Vuelta 2015, no lo olvidemos, no termina hasta Madrid... si la crono de este miércoles lo permite.

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