Contador se cae a 75 km/h y abandona

El ciclista de Pinto se va al suelo en el descenso del Petit Ballon. Tiene una fractura de tibia de la pierna derecha y deberá de someterse a una intervención quirúrgica

Contador, con la rodilla derecha ensangrentada, se calza las zapatillas tras sufrir la caída.
Contador se cae a 75 km/h y abandona
LIONEL BONAVENTURE/afp

La décima etapa entre Mulhouse y la cima de Les Belles Filles, techo de los Vosgos (1.035 metros) era una cita «cinco estrellas, para que nadie se echara la siesta», como anunciaba Contador en la salida. Y lo fue, porque la etapa fue emocionante, de ciclismo de altura. Pero no se vivió el duelo esperado.


El infortunio se cruzó en el camino de Contador en el descenso del Gran Ballon, (km 64), cuando bajaba a 75 por hora. Estaba buscando algo en su bolsillo y la bicicleta se le arrastró debajo de él probablemente debido a un golpe o a un agujero en la carretera. Y se fue al asfalto. Un vendaje en la rodilla y el cambio de zapatillas, que se destrozaron con el golpe, le permitieron volver a la bicicleta.


Un espejismo. El de Pinto, ilusionado con volver a conquistar el Tour, se acercó a su compañero Rogers tras superar el Markstein, le abrazó Rogers entre la niebla y puso punto final al Tour 20114. El ciclista del Tinkoff fue sometido a tres radiografías en la unidad médica móvil de la carrera que confirmaron la lesión: «fractura de tibia» con necesidad de cirugía.


Subido en el coche de equipo lamentó una vez más su espinosa relación con la carrera francesa, Episodios relacionados con el dopaje, como la implicación de su equipo, el Liberty, en la Operación Puerto, y el positivo por clembuterol que le supuso una suspensión de dos años. Problemas físicos, como una lesión cerebral que a punto estuvo de costarle la vida. En el bienio 2004-2006 pasó de esquivar la muerte a la bicicleta, y cuando parecía que iba a vivir el despegue internacional en el Tour de Francia, su equipo se fue a casa antes de empezar.


En 2007 alcanzó su primer Tour de Francia, no sin escándalo previo ya que el danés Michael Rasmussen fue desposeído del maillot amarillo a tres días de París y el liderato pasó al ciclista de Pinto. Una edición en la que la policía registró algunos hoteles en redadas nocturnas. Un año después firmó por el Astana y de nuevo entró en terreno equivocado. El Tour vetó la presencia de la escuadra kazaja por los casos de dopaje, entre ellos el de Alexandre Vinokurov.


Aquel año, 2008, fue, sin embargo, victorioso para Contador, e incluso tranquilo. Ganó el Giro y la Vuelta a España y se convirtió en el primer español en conquistar las tres grandes por etapas. Los problemas con Lance Armstrong dentro del Astana marcaron la cita en 2009, el segundo del madrileño. Solo la carretera puso a cada uno en su sitio. En la siguiente edición, Contador volvió a conquistar París. Un Tour que le terminó explotando en las manos un mes después de su finalización, cuando la UCI le comunica un positivo por clembuterol.


Desde entonces Contador y el Tour han seguido con sus desencuentros. En 2011 quedo quinto, pero el resultado fue anulado por la sanción. Tampoco corrió, por el mismo motivo en 2012. Su regreso al año siguiente  levantó todas las expectativas, pero se encontró con Chris Froome y quedó desalojado del podio. Fue cuarto.


Y este año, 2014, Contador partía como favorito después de una temporada triunfal. Pero una grave caída le ha mandado a casa.