Vicioso se sube a la bici

El ciclista aragonés, que se recupera de una triple fractura de fémur, pedalea por vez primera desde su caída en el Giro

Ángel Vicioso, ayer, con su bicicleta en Alhama de Aragón.
Ángel Vicioso, ayer, con su bicicleta en Alhama de Aragón

El ciclista aragonés Ángel Vicioso, operado hace apenas un mes y medio de la triple factura del fémur derecho que sufrió en el Giro de este año, ya ha tenido su primer contacto encima de la bicicleta.


Por las carreteras de su Alhama de Aragón natal, donde regresó hace unos días desde el Principado de Andorra –lugar en el que tiene fijada su residencia desde hace unos años–, Vicioso volvió a subirse ayer al sillín de una bicicleta por primera vez desde que el pasado 15 de mayo se retirara de la carrera italiana por segunda vez consecutiva.


"Solo me queda volver a acostumbrarme al dolor de culo", bromeó ayer el ciclista del Katusha (con el que tiene contrato hasta 2015) después de hacer una ruta con su bici de montaña de una hora y media.


"He ido despacito, pero ha sido una muy buena experiencia para tomar contacto", explicó Vicioso, que fue desde Alhama de Aragón hasta la vecina localidad de Ateca (unos 15 kilómetros) acompañado de su mujer Raquel.


"Me he sacrificado mucho durante este mes y medio, con dos horas de rehabilitación, una de piscina y 30 o 40 minutos de bici estática todos los días... Y la verdad es que parece que la cosa va bien", relataba el ciclista aragonés para explicar la rápida recuperación que ha llevado a cabo.


El pasado día 15 de mayo el Giro de Italia le tenía reservado a Vicioso la misma suerte que el año anterior. Una multitudinaria caída en la sexta etapa (en la que se vieron implicados sus compañeros Purito González y el italiano Giampaolo Caruso) le dejó con el fémur derecho fracturado por tres sitios. Una lesión que podría haber sido incluso más grave de haber afectado a la cadera, pero con la que, después de casi cuatro horas de intervención y cinco días de descanso, Vicioso salió del hospital romano Villa Stuart de camino a su casa.


"Venía de hacer una gran puesta a punto y estaba muy motivado. Fue una pena. Y, aunque estoy convencido de que esto me podría haber pasado en cualquier sitio, para el próximo año apostaré por el Tour", comentó el ciclista, de 37 años, al que le colocaron un clavo de 28 centímetros y otros dos de doce para afianzar la rotura.


En cuanto a sus próximos objetivos, Vicioso, que de momento se ocupa de prepararse al máximo y "disfrutar mucho de los pequeños" (tiene un hijo de 6 años, Jaime, y una hija de 2, Manuela), solo pide poder correr alguna carrera antes de fin de temporada. "Hay calendario hasta octubre o así, y no me gustaría empezar la siguiente temporada sin haberme probado en esta –aseguró–. La Vuelta a España también esta ahí (comienza el 23 de agosto), pero tengo claro que si hay algún corredor que está en mejores condiciones que yo, no iré. Lo importante es el equipo y sino voy a poder dar el 100%...".


Hasta entonces, y a la espera de viajar unos días a Alemania para reunirse con el equipo, Ángel, quien fue muy bien recibido por sus vecinos a su llegada a Alhama, se centra en recuperarse y aprovechar el tiempo con los que más quiere.


"Lo bueno de esto es que puedo pasar tiempo con mi familia. Sobre todo con mis hijos. Ellos me dan mucha fuerza y ganas de seguir", dijo convencido de que todavía le quedan años para rodar encima de la bicicleta.