Mundial de natación

Las chicas de waterpolo se vengan de EE. UU. y se clasifican para semifinales

Este miércoles la selección española jugará contra Hungría para conseguir un puesto en la final del Mundial.

Un momento del encuentro disputado entre España y Estados Unidos
España se venga de Estados Unidos y se clasifica para semifinales
EFE/TONI ALBIR

España se ha clasificado a lo grande para la semifinal del Mundial y para ello ha tenido que derrotar a Estados Unidos (9-6) y vengarse de la pasada final olímpica, donde las de Miki Oca se dieron a conocer al mundo del waterpolo.


La actuación de la capitana Jennifer Pareja en el inicio catapultó a su equipo. La jugadora del Sabadell fue la mejor del partido, anotó cuatro tantos, pero sobre todo insufló carácter a un equipo que ha hecho otra vez historia.


Lección aprendida. Defensa asfixiante y muchos recursos en ataque. El partido no tuvo nada que ver con la final olímpica. España controló las emociones y el juego, tuvo acierto de inicio, pero sobre todo sabía a lo que tenía y a lo que no tenía que jugar.


Ante el físico, dosis máxima de talento. La puesta en escena fue fulminante. España consiguió un parcial 4-2 de salida. La piscina Picornell se volcó con el equipo y Oca demostró tener milimetrado el encuentro.


Defensas de ayuda, búsqueda de exclusiones, movilidad y rapidez. Es España un equipo con recursos y los explotó al máximo. Además, en los momentos culminantes del partido, la suerte le sonrió en un par de ocasiones.


La reacción de las norteamericanas en el segundo cuarto hizo prever lo peor. Se acercaron hasta el 5-4. Jugaba España al límite en defensa, exprimiendo su agilidad mental frente a un conjunto superior, al menos en peso.


El aprovechamiento de las superioridades resultó decisivo. España tuvo un alto índice de efectividad. Maica García, por fin, apareció y la portera Laura Ester fue el resorte perfecto para creer en la victoria.


La boya española marcó el 6-4 y Seideman puso el 6-5 con ocho minutos por jugarse. Era el momento de sacar el carácter y de creer en el equipo, de sacar provecho de horas y horas de trabajo en el CAR, de mirarse a los ojos y saber de que hoy sería otro gran día.


Maica García marcó el 7-5 después de que la bola entrara rechazada por una rival, Laura López levantó al público con el 8-5 a 1:37 para el final y Roser Tarragó convirtió el 9-5 ante el delirio de la grada. España, las chicas de Oca, lo volvieron a hacer y ya están en una semifinal del Mundial. Hungría les espera.