Montañismo

Pauner regresa del Everest

El montañero aragonés ha dicho que está "roto" y con un sentimiento agridulce por la muerte de su compañero Juanjo Garra y sin entender por qué falló el rescate del alpinista leridano

Carlos Pauner en la cima del Everest
Carlos Pauner en la cima del Everest
CARLOSPAUNER.COM

El montañero aragonés Carlos Pauner ha regresado este lunes a España, tras completar su reto de alcanzar la cima de los catorce ochomiles al hollar el Everest, y ha dicho que está "roto" y con un sentimiento agridulce por la muerte de su compañero Juanjo Garra y sin entender por qué falló el rescate del alpinista leridano.


Así lo ha manifestado en el aeropuerto de Barajas, donde Pauner ha llegado a las 14.20 desde Qatar y donde ha relatado que habló con Garra después de que este pasara su primera noche "atrapado en la montaña" y le prometió que al día siguiente le sacarían de ahí.


"Estaba muy fuerte, consciente y motivado. Le pedí que aguantara una noche más, que el equipo de rescate (liderado por Jorge Goechaga) llegaría al día siguiente. Y aguantó esa noche y cuatro más, pero cuando llegaron a por él, fue demasiado tarde", comentó.


El alpinista leridano Juanjo Garra ha fallecido en la cima del Dhaulagiri (Himalaya), la séptima cumbre más alta del mundo, al no haber sido posible su rescate después de que el pasado día 23 sufriera una caída a más de 8.000 metros tras iniciar el descenso.


La dificultad de realizar un rescate en helicóptero a esas alturas ha impedido durante estos días que Garra haya podido ser atendido y lo ha retenido demasiado tiempo a una altura excesiva.


Carlos Pauner ha recordado en Barajas que él pasó tres noches en la misma situación que Garra y ha asegurado que es una experiencia "durísima porque tienes que tener la suerte de que el cuerpo y todo lo demás aguanten". Pero ha reconocido que su situación era mejor porque era autónomo y podía ir bajando, al recordar que Garra "estaba bloqueado con un tobillo roto y no podía moverse".


Tras reconocer que la montaña proporciona sentimientos agridulces "porque hay triunfos y pérdidas", el montañero aragonés ha recordado su ascenso al Everest (8.848 metros) y ha relatado que al llegar al campo 4 les dieron malas noticias meteorológicas sobre cambios de vientos, por lo que tuvo que decidir si continuaba el ascenso o probaba otro día.


Junto a su compañero Domingo de Andorra y dos sherpas, Pauner decidió subir de noche con oxígeno y alcanzó la cima a las 4.30, poco antes de amanecer, lo que le proporcionó un "espectáculo único", al poder contemplar solos el resto de las montañas del Everest.


"Ha sido un broche final bonito", aseguró el aragonés, mientras reconocía que le gustaría haberlo hecho sin oxígeno, como los otros trece ochomiles, por lo que apuntaba a la posibilidad de que en un futuro afronte de nuevo este ascenso.


En el futuro Pauner tiene previsto escalar "montañas distintas no escaladas o sietemiles difíciles", pero lo más inmediato es descansar y recuperar la voz.


Carlos Pauner holló su primer ochomil en julio de 2001 al conquistar la cima dekl K-2 (8.611) y concluyó su reto el 22 de mayo de 2013 al subir al Everest.