El mes que viene se pondrá a la venta el nuevo Toyota RAV4, con una carrocería muy moderna, un interior más ergonómico que en la anterior generación y con propulsores diésel, de 124 y 150 cv, o de gasolina, de la misma potencia que el más poderoso de los de gasóleo.

Con una longitud de 4.570 mm, (205 más que su predecesor), mayor distancia entre ejes (+100 mm), 30 mm más de ancho y 25 más bajo, la cuarta generación de este todocamino compacto presenta una silueta acorde con los nuevos tiempos.

El exterior combina los emblemáticos elementos del nuevo lenguaje de diseño frontal de Toyota. Mezcla el estilo de la parrilla inferior Under Priority con el concepto Keen Look (Imagen Sofisticada) de los faros y las luces de circulación diurna de leds, que confieren una potente presencia en carretera.

El diseño Under Priority incorpora una gran abertura inferior trapezoidal, enmarcada en el paragolpes, y una parrilla superior más pequeña y que ocupa todo el espacio entre los nuevos grupos ópticos.

El emblema de la marca domina la parrilla superior, que incorpora una barra embellecedora cromada central que se extiende visualmente hasta los faros para acentuar la anchura. Esta fluye hacia una 'ceja' de los grupos ópticos, estrechos y definidos, que combinan los leds con unos proyectores situados en los extremos del vehículo.

Flanqueada por los antiniebla, la forma trapezoidal de la gran abertura del paragolpes inferior destaca gracias al contraste de un acabado en resina negra.

De perfil, hereda una línea de cintura elevada y la silueta distintiva que ha caracterizado las sucesivas generaciones. Por encima de una línea de cintura más pronunciada, los pilares central y trasero ocultos enfatizan la mayor extensión de las ventanillas y la amplitud del interior del vehículo. Por debajo, el contraste de la superficie convexa de la carrocería y la forma cóncava pronunciada de los pasos de las ruedas y los umbrales de las puertas añade dinamismo.

En la parte posterior, el habitáculo se estrecha marcadamente, lo que contrasta con la anchura de la parte inferior de la carrocería y da lugar a unos poderosos salientes sobre los pasos de las ruedas traseras que subrayan la presencia estable y firme del vehículo.

La contundencia de la línea de cintura y los pasos de las ruedas traseros se enfatiza aún más gracias a los grupos ópticos traseros de nuevo diseño, que contrastan con las proporciones de los salientes traseros y envuelven las esquinas del vehículo para resaltar la luna trasera.

Ahora, el nuevo portón, rematado por un alerón integrado en el techo, se abre hacia arriba, y se ha eliminado la rueda de repuesto.

Propulsores

La gama de motores comprende una nueva unidad diésel D-4D de dos litros y 124 cv, combinada con una transmisión manual de seis velocidades y tracción delantera; un diésel D-4D de 2,2 litros y 150 cv, que puede equiparse con la misma transmisión manual o una automática y la tracción a las cuatro ruedas del Sistema integrado de conducción dinámica AWD; y un motor de gasolina Valvematic de dos litros y 150 cv, combinado con la transmisión manual o la Multidrive S y tracción a las cuatro ruedas.