Las escuchas telefónicas durante el operativo de la 'Operación Puerto' están revelando aspectos de la supuesta trama de dopaje urdida por José Luis Merino Batres y Eufemiano Fuentes, que se señalaba a sí mismo como "el responsable de todo esto", durante el fin de semana del 12 al 14 de mayo de 2006, con profusión de términos en clave como "Siberia" (arcón congelador), "polos" (bolsas de sangre) y "bocadillos" para clientes como Birillo (Ivan Basso), que estaban compitiendo en aquel momento en el Giro de Italia o en otras "fiestas" futuras.

Este martes comenzaron las audiciones de las escuchas grabadas de los teléfonos de Fuentes durante el mencionado fin de semana, con excepción de las que tratan de temas personales. Tras semanas de declaraciones de imputados, testigos y peritos analizando el caso, una cuarentena de grabaciones mostraron la parte más cruda de la trama que se está juzgando en la Sala de Lo Penal número 21 de Madrid.

"Histérico" por el volumen de trabajo

Las grabaciones se produjeron en el puente de San Isidro en Madrid, con Merino Batres en Altea de vacaciones y Fuentes "histérico" por el volumen de trabajo y la carencia de productos. "Tengo que sacar adelante esto, al fin y al acabo el responsable de todo esto soy yo. Birillo está esperando y qué le digo a Birillo,  ¿que no hay comida? Se va el carro ya y está en un sitio imposible de llevarle bocadillos. Estaba previsto hace muchos meses que este fin de semana le preparábamos un bocadillo. Si no hay salchichón, ya le pondré chorizo o queso. Le habíamos prometido un par de polos", le dijo Fuentes a Merino en una conversación registrada el sábado 13 de mayo.

Fuentes le explicó a su socio que pensaba "dar prioridad a los siete que están en plena batalla" y que se sentía "pillado" por todas las laboras que debía realizar. Ante la ausencia de Merino, le pide permiso al hematólogo para entrar en su consulta a por "los polos para el de la Huerta" (supuestamente Luis León Sánchez). Sin embargo, "es una putada" no poder atender a otros clientes por falta de materia prima. "Al alemán y al italiano que les den por culo", dijo Fuentes.

El sábado, el médico canario y José Ignacio Labarta, otro de los imputados en el juicio oral contra la salud pública al que Fuentes se dirige repetidamente como "cariño" ("te pediría matrimonio si no fueras un tío"), comentaban la actuación de supuestos clientes durante la etapa del Giro.

"Ha habido escabechina en el Giro. El Búfalo (José Enrique Gutiérrez) ha sido cuarto, a 16 segundos Birillo (Basso) y a 24 Zapatero (Michele Scarponi) y el Uno (Unai Osa). Todos muy bien. Los que te tocan están disputando y bien", le comunicaba Labarta a Fuentes vía telefónica.

Relación con Ignacio Labarta

El preparador físico aragonés era el principal confesor del médico a tenor de las conversaciones grabadas. "Estoy haciendo polos con lo poco que me queda. Voy a probar a ver cuánto me da, y he conseguido hacer dos. Este (Merino) me jodió uno, lo 'desjodí', lo arreglé y ahora los mando, me queda nada más que centrifugar. Me ha salido como yo quería, de puta madre", se alegraba el domingo hablando con Labarta, al que pedía consejo para la reunión que iba a mantener el día siguiente con Manolo Saiz, al que se referían como "el Gordo" e incluso en una ocasión como "el impresentable" por una deuda que se remontaba a la época de la ONCE.

"A ver si con todo el estrés del fin de semana voy a decir algo que no deba", señala Eufemiano. "Yo creí que no sabía nada y resulta que lo sabe todo, hablo de su gente. Encima no te paga. Le dices: 'Ahora me tienen que pagar, pero como sean como tú y no me paguen'. Eso por ejemplo le puede doler, ten cuidado que ya sabes que luego no duerme", le contestó Labarta con tono irónico. Fuentes también consultó a 'Ali Babá' (Alberto León). "No te comprometas a nada con el 'Gordo' porque he tenido una movida muy gorda. Escucha lo que tengas que decir pero no cierres nada", le pidió el ex biker, ayudante de la trama que se suicidó en 2011.

La reunión entre Fuentes y Saiz se celebró el lunes 15 de mayo y, ocho días después, la Guardia Civil les detuvo en el transcurso de un segundo encuentro del que ambos imputados dan versiones diferentes dentro de la línea habitual del juicio, en el que cada imputado da un testimonio distinto que, en buena lógica, no puede casar con los demás.