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Una ampliación a toda velocidad

El Hotel Calpe de Alcañiz ha triplicado su capacidad en el último año. Estos días vive la vorágine del Gran Premio de Aragón.

Un pasillo lleno de imágenes desemboca en una de las suites, donde espera Javier Vinuesa.
Una ampliación a toda velocidad
GUILLERMO MESTRE

Es un testigo privilegiado de todas las actividades de Motorland, vive en primera persona la vorágine del circuito. También se ha visto obligado a adecuarse a las exigencias propias de un evento como el Mundial de motociclismo, que esta semana visita por segunda vez el trazado alcañizano. El Hotel Calpe, en Alcañiz, vive de estreno el paso de la competición más importante del motociclismo internacional. Este año estrena sus nuevas habitaciones, una ampliación llevada a cabo en tiempo récord -apenas 7 meses- y que ha triplicado su capacidad: a las 42 habitaciones disponibles sumó, tras las obras, otras 78. "Realmente, estrenamos la parte nueva del hotel con la celebración de las Superbikes. Fue un éxito. Desde entonces y hasta ahora hemos seguido rematando el trabajo. Y aún nos queda. A partir del próximo mes nos meteremos de lleno a remozar la parte vieja. El número de habitaciones será el mismo, pero todas ellas estarán equipadas igual que las nuevas", detalla Javier Vinuesa, director de la instalación, propiedad de la empresa aragonesa Hoteles Gargallo.


La ampliación se ha ejecutado a toda velocidad, algo equiparable al poco tiempo que ha necesitado Motorland para colocarse en la élite mundial. Esta circunstancia motiva la expansión por la que han optado los dirigentes del Hotel Calpe. La decisión, además, viene a mitigar uno de los déficits que más acusa el circuito alcañizano: la falta de plazas hoteleras. No es de extrañar, por tanto, que todas las habitaciones estén ocupadas durante la semana del Gran Premio de Aragón. "Acaban de comunicarnos la fecha del próximo año y ya puedo decir que tengo todo el hotel reservado al completo para el gran premio de 2012. Para los sucesivos, todavía no. La explicación es sencilla: no conocemos oficialmente cuáles serán las fechas que escogerá la organización del Mundial para visitar Alcañiz", apunta Vinuesa.


Por si no hubiese ya suficientes elementos de unión entre el circuito y el Hotel Calpe, los pasillos de la parte nueva tienen una decoración que conecta al motor con Alcañiz. Lo explica Javier Vinuesa: "Supimos que un fotógrafo (Juan M. Ingles) posee una importante colección de fotos realizadas en el antiguo circuito urbano de Guadalope. Nos las cedió, las tratamos y ahora inundan de imágenes las zonas comunes de la zona ampliada del hotel". En blanco y negro, también en color, cientos de coches y motos saludan a los huéspedes, a quienes recuerdan que la pasión por el mundo del motor llegó a la localidad mucho antes que Motorland. Pura tradición deportiva.


Multiplicaciones


Si el número de habitaciones se ha multiplicado por tres en el Hotel Calpe, el de trabajadores se duplica con motivo del Gran Premio de Aragón. "Estos días tenemos al doble de gente trabajando en el hotel. El personal se ha ido incrementando progresivamente, ya que este evento se prepara con bastante tiempo de antelación. Por Alcañiz pasan miles de personas este fin de semana, lo que nos obliga a preparar bien el servicio de alimentación, bebidas... Nuestro hotel es el de mayor capacidad de Alcañiz y, además, preparamos varias actividades complementarias. Es indispensable que contratemos a más gente", indica el director del hotel alcañizano, al que parece no agobiar lo que se le viene encima: "Vamos a preparar una terraza para unas 500 personas. También tenemos un bufé para unos 450 comensales, además de la cafetería y el restaurante, con 150 plazas. Afortunadamente, tendremos mucho trabajo".