LITERATURA

Un libro analiza la represión de los demócratas antifranquistas de 1958 a 1977

Alberto Sabio narra los "complicados" años del 'tardofranquismo' hasta los años de la Transición de la mano de testimonios de "gente corriente" que sufrió la represión policial y que contribuyó para avanzar hacia la democracia.

Un libro del historiador Alberto Sabio analiza los "complicados" años del 'tardofranquismo' (1958) hasta los años de la Transición (1977) de la mano de testimonios de "gente corriente" que sufrió la represión policial y que contribuyó, con sus movilizaciones, a desestabilizar el régimen para avanzar hacia la democracia.


'Peligrosos Demócratas', como así se llama el libro, está documentado en informes policiales de la época y refleja los años convulsos y "nada plácidos" del cambio hacia la democracia y demuestra que los orígenes de la Transición Española fueron "mucho más duros" de lo que habitualmente se difunde.


Así lo ha afirmado Alberto Sabio, doctor en Historia Contemporánea de la Universidad de Zaragoza y autor de este libro editado por Cátedra, que será presentado mañana jueves en el Edificio Paraninfo de la capital aragonesa.


La presentación contará con la intervención del escritor Benjamín Prado y el secretario general de CC.OO. en Aragon, Julián Buey, además de la actuación de Eduardo Paz y Joaquín Carbonell, quienes interpretarán algunas de las canciones censuradas durante los últimos años del franquismo.


Sabio ha contrastado más de mil expedientes policiales e informes de la Dirección General de la Seguridad y ha entrevistado a medio centenar de personas que nunca figuraron en la "galería de los héroes", pero que ofrecen las "claves" del proceso democrático marcado por el "miedo y la incertidumbre".


"Toda esa gente que pasa por la comisaría y la cárcel no pide luego responsabilidades por las atrocidades sufridas o no consideran que sea el momento justo, y ese elemento es un factor clave que determinar el éxito de la Transición", ha comentado.


En este sentido, ha apuntado que cuando se habla del consenso de la Transición no se destaca que esta fue posible en parte porque la gente que sufrió "atrocidades" decidió "echarlo al olvido conscientemente" y no exigir justicia.


A lo largo de estas páginas, se valora la "tradición democrática española", frente al "blanqueo" del 'tardofranquismo', y se insta a asumir al pasado por muy "incómodo" que sea y a integrarlo en la experiencia histórica porque hacerlo "refuerza la solidez de la democracia", ha explicado.


El término 'Peligrosos demócratas' es una expresión que Sabio encuentra en numerosos informes policiales y que hace referencia a aquellas personas -estudiantes, obreros, párrocos, intelectuales, periodistas, entre otros- que suponían una "ruptura para el orden" del régimen.


"Hoy en 2012, cuando a muchos les parece que la democracia está un poco desgastada, corremos el riesgo de pensar que la transición fue muy fácil; al fin y al cabo Franco muere en la cama. En este libro se intenta demostrar que aquellos años fueron más duros de lo que se piensa, hubo abundantes nubarrones, ruido de sables, y derramamiento de sangre", ha resaltado.


La evolución de los agentes policiales durante la Transición y los primeros años de democracia es analizado también por Sabio, especialmente el cambio que algunos de ellos protagonizan concienciados de que su labor debe ser un servicio al ciudadano, dejando a un lado la leyenda de "polis duros".


"Algunos de ellos habían estado en las cárceles republicanas durante la Guerra Civil y se sienten legitimados para la venganza. A partir de 1975, algunos cambian porque tienen una concepción más profesional, mientras que otros mantienen sus vínculos con la ultraderecha", ha indicado.


Entre 1958 y 1977, periodo en el que se centra el libro, aumentaron las protestas sociales en la calle, y España llegó en 1976 a concentrar la mayor conflictividad laboral de Europa, unas reivindicaciones que fueron acompañadas de connotaciones políticas dado el momento histórico.


El libro recoge sucesos como el suicidio de un basurero en 1970 tras ser detenido en la capital aragonesa por repartir octavillas políticas en el paseo de Independencia, testimonios de trabajadores del mundo sindical clandestino, de curas, periodistas e intelectuales y narra los vericuetos de algunos estudiantes.


Sabio relata también la destitución del cura de la localidad zaragozana de Fabara -fallecido en 2009- por introducir ideas marxistas, según el Arzobispado, lo que provoca la solidaridad de treinta párrocos de la provincia.


"A raíz de esta anécdota se introduce cómo algunas partes de la Iglesia estaban disconformes con la dictadura. En los informes policiales, se ve cómo los policías anotaban cuidadosamente lo que decían los párrocos en las homilías", ha concluido.