Ya no es reportera, sino actriz y presentadora. "Me siento divinamente bien con mi nuevo papel. No me molesta que me pregunten nada, aunque solo contesto lo que me da la gana", aclaró ayer Pilar Rubio en uno de los salones del colegio mayor Pedro Cerbuna de Zaragoza. Junto a ella, Miguel Ángel Muñoz, Salomé Jiménez, Norma Ruiz y el director Miguel Ángel Lamata llenaban el ambiente de algo más que tensión. "Nunca se había estado tan bien aquí", comentó Luis Alegre, encargado de moderar el coloquio 'La buena estrella', que esta vez recibía a varios de los protagonistas de 'Tensión sexual no resuelta'.

Los más contentos, Jiménez y Lamata, ambos zaragozanos. "Agradezco mucho el cariño que me muestran aquí", aseguró el director, que admitió no haberle llevado una vela a la Virgen del Pilar como prometió en una entrevista a HERALDO. "De eso se encarga mi madre. Ella seguro que besó mil veces el Pilar para que la gente viera la película".

De momento, la ofrenda le ha funcionado y la suya es la película española con mejor taquilla de 2010, superando a otras como 'El mal ajeno' o 'Pájaros de papel', de Emilio Aragón, presidente de la ex cadena de Pilar Rubio. "Se estrenaron en diferentes semanas y son muy diferentes. No es una competencia", aclaró la presentadora de Telecinco, que confesó tenerle aprecio a Aragón. "Es alguien que ha visto mucha tele y mucho cine", agregó Lamata.

Entre las actrices guapas y las escenas con alto contenido sexual, Miguel Ángel Muñoz admitió haber sentido bastantes nervios durante el rodaje. "Por más que todos sean profesionales, siempre cuesta estar en pelotas. Además, hay que hacerlo pendiente de que no se te levante nada", dijo. "No hay que pensar mal", bromeó el actor.

Sus compañeras, Jiménez y Ruiz, recordaron que tuvieron que dejar la vergüenza a un lado desde el primer día. "Les tocó una secuencia complicada. Con sexo, vamos. Pero estas tercas decidieron acabar la escena el mismo día", recordó Lamata.

A pesar del éxito, el tercer largometraje de Lamata no ha tenido críticas demasiado positivas. "No. No comparto eso, esta vez más del 80% ha hablado bien. El balance es bueno ", enfatizó el director. "Parece que la comedia está reñida con la crítica, pero detrás de tanta risa se pueden leer cosas más profundas", añadió Jiménez.

"Lo que importa es que a la gente le guste y eso lo hemos conseguido", continuó Ruiz.

Lamata, por su parte, piensa que a comparación de sus otros filmes, este es el mejor. El director aragonés afirma que no le molesta que critiquen su apuesta por las comedias. "Esta vez hay humor inteligente, pero también tonto. Me gusta el humor idiota", dijo el cineasta, que al igual que Salomé Jiménez negó sentirse un referente en el mundo de las comedias. "Lo que busco es que las pelis molen", afirmó el realizador antes de echar un piropo a su protagonista maña: "Tiene algo de Gwyneth Paltrow y Jennifer Aniston".