LA RECOMENDACIÓN

Paco Rallo: 40 años de arte y diseño

El creador aragonés expone en el Instituto Français de Barcelona la muestra ?La indisciplina del pensamiento?, que recoge una amplia selección de obra gráfica.

Una de las obras de Paco Rallo que se exponen en el Instituto Francés de Barcelona
Paco Rallo: 40 años de arte y diseño
HERALDO.ES

De casta le viene al galgo. Paco Rallo (Zaragoza, 1955), pintor y diseñador, se educó antes que nada a la sombra de su padre el escultor Francisco Rallo. Luego la vida y su ávida curiosidad estética le llevaron a ser miembro fundador del grupo ‘Forma’, a realizar ‘happenings’ y ‘performances’ y a mantener una actitud rebelde y dialéctica, experimental e indisciplinada, en un momento en que el arte era un instrumento de combate.


A partir de 1989 empezó a alternar su tarea con de pintor con una faceta también estimulante y muy creativa: el diseño gráfico. Paco Rallo fundó en 1989 Vertigo Diseño, en 1993 creó Futuro. Espacio de Diseño, y en 2005 se unió, con Manuel Estradera o Strader, al Grupo Camaleón. En el Centro de Historias (título que se le debe al propio Rallo), se expuso recientemente una historia del grupo, y en la última parte se veía el intenso y variado trabajo que han desarrollado ambos socios y su equipo.


Estos días, Paco Rallo expone en el Institut Français de Barcelona la muestra ‘La indisciplina del pensamiento’, en la que se exhiben muchos de sus trabajos realizados entre 2001 y 2011, que son un buen pretexto para celebrar sus primeros 40 años en el arte. Paco Rallo dice: «El artista, el creador, ha pasado a ser un mago-diseñador, un cleptómano icónico, objetual y un ávido recolector de recursos que maneja desde el pensamiento». He ahí un autorretrato. A él todo le sirve para lograr lo que quiere: crear una imagen de marca, configurar un buen cartel, presentar una exposición con su propuesta de montaje, confeccionar la maqueta de un libro, ilustrar poemas de Julio Donoso, o realizar imágenes alusivas, impregnadas de impacto y metáforas, de asuntos candentes: la violencia de género, la invitación al amor a través de los besos, oponerse a la guerra. O cosas más cotidianas como un festival de jazz, como se ve en una pieza sencilla pero poderosa como ‘El cantor de jazz’.Un creador ecléctico


En el catálogo de la muestra, dice una de sus estudiosas, Raquel Pelta: «Si hay algo que define el trabajo de Paco Rallo es, precisamente, ese ‘Arte en todo’ o ese ‘Espacios de confluencia’, pues ninguno de los dos títulos es casual y ambos son, en gran medida, una auténtica declaración principios».


Paco Rallo es, como una buena parte de los diseñadores, un creador ecléctico, un inventor de imágenes a partir de obras originales o de obras que ya existían. Todo le atrae. De entrada le interesan todas las disciplinas: la pintura (y dentro de ella, le da igual el minimalismo el arte barroco, le da igual el retrato, la ‘vanita’ o el bodegón), la escultura, la fotografía, la videocreación, el arte digital, la tipografía o la amplia panoplia de nuevas tecnologías. Y a todas ellas acude con la necesaria impunidad.


En sus diseños se percibe siempre esa mirada de pintor, esa pasión por las imágenes, el sentido de la publicidad. Y se perciben sus claves: un peculiar sentido de libertad, que en ocasiones lo acerca a lo kitsch y al mestizaje visual, la detonación, el impacto, el color, el uso de la paradoja y aún del humor. Forma (y eso quiere decir tema, composición, atmósfera), trallazo cromático y tipografía es la trilogía esencial de la obra de Rallo. No se puede hablar de manera genérica de los temas o de las obsesiones, pero ahí están el paso del tiempo, la sutileza y la emoción, el amor y el deseo, la violencia y la muerte. Y está la vitalidad constante y el diálogo con la propia historia del arte.