La iconografía sentimental de la pintora Eva Armisén conecta con el público asiático

"El público coreano ha conectado directamente con mi obra y mi participación en la feria, que acaba de terminar, ha sido todo un éxito. Una experiencia genial". Así resumía ayer la artista aragonesa Eva Armisén su paso por el KIAF 09 Korea International Art Fair, una de las citas artísticas más importantes del continente asiático, donde, durante diez días, ha expuesto su serie de pinturas. Esta ha sido su segunda cita, en menos de un mes, en este país asiático ya que, con anterioridad, ha mostrado toda su obra gráfica en el Seúl International Print & Photo Art Fair.

Sus pinturas llenas de color, con un toque infantil y ese espíritu positivo tan característico en toda su obra calaron entre el público coreano hasta el punto de que esta es la segunda vez que visita este país.

La primera tuvo lugar hace un año y ocurrió por causalidad. Eva Armisén había sido invitada por la galería Andrewshire, de Los Ángeles, para que participara en una feria en Seúl y varias galerías coreanas vieron su obra y se interesaron por ella.

Fruto de ese primer contacto son las citas de este año, a las que ha acudido con dos galerías locales: Gongsan Gallery y SP Gallery. Y para 2010 acaba de cerrar dos exposiciones individuales con otras dos galerías, una en Seúl y otra en Daewu.

"Creo que esta primera toma de contacto me ha permitido abrir otras posibilidades realmente interesantes para mí. Y lo más importante de todo es que he podido comprobar que, en un país tan diferente al nuestro, con una cultura tan desconocida para mí, la reacción de la gente frente a las obras ha sido igual que en España, en Portugal o en Estados Unidos", señaló desde el país asiático.

En la feria de arte seriado de Seúl, Armisén mostró, entre otras piezas, sus últimas colecciones de grabados, que ha realizado con la técnica del carborundum, un sistema aditivo que consigue trazos enérgicos de un negro intenso.

Alfombras voladoras

Y después de Corea, la obra de Eva Armisén vuelve a España, en concreto a la Feria Internacional de Arte de Valencia, donde, hasta el 26 de septiembre, mostrará sus obras incluidas en el catálogo de la Galería Alba Cabrera.

En esta ocasión, presentará pinturas, obras sobre papel y algunas de las piezas de la colección 'Alfombras voladoras', que ideó el pasado año para la empresa de diseño textil de Jordi Mas y que ahora están recorriendo el mundo, como si de verdaderas alfombras voladoras se tratara.

La colección consta de once piezas elaboradas con lana de Nueva Zelanda y seda, en edición limitada. Muchas de ellas contienen mensajes de amor y su iconografía es muy similar a la que puede verse en sus cuadros y dibujos.

"Mi pintura habla sobre los sentimientos, sobre las cosas que tenemos cerca y, a veces, pasan desapercibidas aunque sean las más importantes. Son piezas con las que pretendo emocionar", asegura la pintora zaragozana.

Cádiz, Madrid, Londres, California o Lisboa son otros de los destinos donde esta pintora mostrará sus creaciones hasta finales de año. Y en diciembre, está prevista la presentación del libro disco 'Qué me está pasando', un trabajo que ha elaborado en colaboración con Marc Parrot y en el que, fiel a su obra, habla de sentimientos.