'MADE IN' HUESCA

La gran mano de Loporzano se cierne sobre Tannhäuser en La Scala de Milán

La empresa oscense Tecmolde ha construido esta pieza para el montaje hecho por La Fura dels Baus y Zubin Mehta.

La gran mano de Loporzano se cierne  sobre Tannhäuser en La Scala de Milán
La gran mano de Loporzano se cierne sobre Tannhäuser en La Scala de Milán
ROBERT DEAN/EFE

¿Cómo iba a imaginar Wagner que el destino de su Tannhäuser iba a estar escrito en una mano gigante salida de la localidad oscense de Loporzano? Pues así ha sido, gracias a la osadía de La Fura dels Baus, la creatividad del escenógrafo Roland Olbeter? y la pericia industrial de Julio Luzán y su empresa Tecmolde, asentada precisamente en este pequeño municipio de poco más de 500 habitantes situado a 8 kilómetros de Huesca.

"Lo que nosotros hacemos es convertir piezas muy pequeñas en otras muy grandes, por ejemplo, de 20 centímetros a 10 metros, con una tecnología a base de escáneres 3D y fresadoras", resume Luzán, un asturiano que hace muchos años encontró en Loporzano el lugar idóneo para quedarse a vivir. "Es mi sitio, nos gustó el pueblo y compramos una casa. Siempre me he sentido muy apoyado por la gente y mis hijas son de aquí", dice con sencillez, feliz de la decisión que tomó.

"Parece que todo se tenga que hacer en Madrid o Barcelona, y no. Sin complejos. Estamos a la cabeza en este tipo de trabajos y la gente que necesita estas cosas va donde tú estás. Vivir en este pueblo nunca ha sido un inconveniente", explica.

En Loporzano, Luzán ha fundado dos empresas. Primero fue ICP, especializada en la fabricación de escenografías y decorados para teatro, cine y televisión. En su currículum figuran películas como 'Astérix y Obélix', 'El perfume' o 'El Che'; decorados para programas de Aragón Televisión y TV3; y multitud de elementos para ambientar anuncios publicitarios "de Freixenet, de Codorniu, de Danone...", enumera Luzán, entre cuyas creaciones se han movido los actores Gérard Depardieu, Meg Ryan o Anthony Quinn; la modelo Cindy Crawford o el piloto Fernando Alonso, entre otras estrellas.

Más recientemente, Julio Luzán ha fundado Tecmolde, con la que busca dar servicio a un sector más exigente si cabe: arquitectos y artistas. "La arquitectura moderna utiliza líneas muy orgánicas, complejas, difíciles de encofrar", señala, como ejemplo de la utilidad de sus moldes en la edificación.

Con respecto a la vertiente escultórica, Luzán comenta que "el arte tiene un proceso de creación, pero hay una fase intermedia más 'industrial' en la fabricación de la pieza. Nosotros podemos ahorrar mucho trabajo al artista, que luego solo tiene que dar su toque final", aclara Luzán. "Si Miguel Ángel hubiera tenido nuestras máquinas, le hubiesen ahorrado mucha faena", añade.

Luzán, gran admirador de los artistas clásicos, dice que la labor que él desarrolla está "entre la artesanía y la industria", y asegura que no se considera en modo alguno un artista. Y eso que, según cuenta, una vez le encargaron hacer una réplica de 'El pensador' de Rodin. "Me dieron un día y medio y dos fotografías de la obra, una de lado y otra de frente. Cogí la motosierra y estuve todo el día y toda la noche trabajando. Lo hice en un bloque de poliestireno de metro y medio de altura. Fue una pasada, estaba totalmente concentrado, empecé y poco a poco iba apareciendo la figura, fue apasionante", recuerda.

En Tecmolde están empleadas 10 personas y el propio Luzán se considera a partes iguales "empresario y trabajador", pues aparte de gestionar la empresa y buscar nuevos mercados -ya tiene encargos en Japón, Corea, Suiza y Alemania, entre otros países-, no para de hacer diseños propios y buscar nuevas aplicaciones a lo que va aprendiendo con la práctica. "Yo pruebo, hago cosas, porque los medios y la tecnología te van llevando a otros caminos. Y hacemos cosas tan diferentes que cada una es un reto", comenta Luzán.

Durante mucho tiempo, estuvo acostumbrado a que las piezas que salían de su fábrica fuesen efímeras. "No podías encariñarte con nada, porque al acabar de usarlo lo iban a tirar. Hemos hecho cosas muy bonitas y espectaculares, y al acabarlas siempre había un momento de disfrute personal", dice Luzán, que con su nueva empresa sí está elaborando obras que perdurarán. Por ejemplo, un retablo en madera, de estilo barroco, para una iglesia oscense. "Es un trabajo permanente y fabricarlo es una sensación curiosa", admite.

Entre sus trabajos más recientes están también un avión, una colección de enormes estatuas de bebés ángeles y diablos diseñados por el colectivo artístico ruso AES+F que se expusieron en una calle principal de Lille (Francia), y un encargo "importante" para una película de la que, por discreción, no da más detalles.