¿Tiene Soria el peso que merece en las Cortes de Castilla y León?

No, para nada. Tampoco lo tienen otras provincias de Castilla y León. Nuestros habitantes son pocos y nuestro peso a la hora de conseguir cosas, también. Nunca hemos tenido esa fuerza, y eso que tenemos cinco procuradores. Soria ha sido una provincia olvidada. Aquí llegó tarde la concentración parcelaria y hemos mantenido esa tendencia. Hemos gastado dinero en casas rurales y cambios productivos que no han generado ni trabajo ni la suficiente entidad provincial.

¿Qué puede hacer IU por Soria?

Izquierda Unida nunca ha tenido un procurador soriano, no tenemos experiencia como para saber qué podríamos hacer, pero tendríamos una voz social. Una provincia como Soria necesita que haya una voz que venga de la izquierda, que es una manera importante de gobernar. Hay que buscar propuestas sociales y honestas. Nosotros no seremos los más honestos del mundo, pero aquí no hay corrupción.

¿Hay alfombras que levantar en las Cortes?

Estoy absolutamente convencido. Creo que es imposible que no haya una corrupción, aunque sea mínima, como la que ha ocurrido con el alcalde de Valladolid. Es muy fácil entrar en estas cuestiones cuando se está en el poder, sobre todo cuando se convierte en algo dinástico. Tenemos los parques eólicos, la Ciudad del Medio Ambiente… Creo que todo esto, tarde o temprano, tendrá un referente, no sé si de corrupción, pero sí de favoritismos. Estoy convencido.

¿Cuál es su postura sobre la CMA?

La postura de Izquierda Unida es la que ha adoptado hasta ahora el juzgado. La CMA es una ciudad construida ilegalmente. Hay que restablecer el soto de Garray y marcharse de allí. Si se hubiese querido hacer un gasto social importante sin especular con el suelo se hubiese hecho algo en la capital. Sin embargo, hemos partido la ciudad en dos. Con el presupuesto de la CMA, Soria podría haberse convertido en una ciudad absolutamente vivible. Todos tenemos esa sensación. Ese gasto no ha tenido sentido. En la capital hubiese permitido construir viviendas sociales, fomentar la accesibilidad… Personalmente, soy partidario de tirar la Cúpula de la Energía. No tiene ningún sentido. Será la obra insigne de algún arquitecto, pero ese no era el sitio. Es un monolito a la estupidez del género humano. No hay dinero para mantenerla.

¿Cree que el medio rural tiene las horas contadas? ¿Cuál es la receta de IU?

Sí, tiene las horas contadas y, personalmente, me parece un error. Creo que es más fácil vivir en los pueblos que dejarlos morir y construir en ciudades en las que, al final, tenemos que vivir unos encima de otros. Camaretas, que en su momento fue otra historia para no dormir, ha hecho que mucha gente de Soria se vaya a vivir allí. En Soria, vivir no es fácil. Es una ciudad muy alta y llena de cuestas. La gente joven ha buscado ese entorno para edificar su futuro. Encontrar una receta es difícil. La juventud busca estabilidad y trabajo y en el medio rural es muy difícil encontrar uno. Pertenecen a una generación muy bien formada que quiere dar rienda a su crecimiento personal. Puede que dentro de unos años vuelvan, pero ahora buscan otra cosa. Personalmente, creo que la crisis ha venido para quedarse. El capitalismo se ha caído y hay tres millones de parados estructurales que podrían no volver a encontrar trabajo.

Se crea empleo, pero precario...

Los empresarios españoles piensan que la competitividad viene determinada por el bajo coste de la mano de obra. Hablan de los trabajadores como recursos humanos. El dinero que se obtiene no se reinvierte para ganar calidad. Se gasta, se especula...

¿Seguirá apoyando al candidato local, Enrique García, con la denuncia del parquin?

Sí, es una cuestión muy clara. Soria fue una ciudad cómoda. No entiendo la necesidad de hacerle una agujero a La Dehesa para meter coches cuando la gente ya no baja al centro en automóvil porque tiene que dar la vuelta a España para llegar allí. No estoy a favor de que se haya hecho. Imagino que habría otras formas. Quien gobierna tiene que tener coherencia para conformar a casi todos. No se puede gobernar con una mayoría absoluta casi dictatorialmente, tienes que gobernar también para el que no te ha votado. El resto de ciudades de España están buscando maneras de no dividir la ciudad y aquí hemos hecho lo contrario sin tener ningún sentido. Se podría haber permitido el paso de vehículos a determinadas horas para no generar este despropósito.

La nueva Escuela Oficial de Idiomas, la ampliación de La Audiencia... ¿Se retomarán y finalizarán en esta nueva legislatura?

Estos proyectos tienen que hacerse cuando sanidad y educación sean públicas, cuando haya ayudas a la tercera edad… Eso sí, si se presupuesta algo hay que gastarlo. Cuando uno gobierna tiene que administrar. El pueblo es el que tiene que gobernar. Ellos son interinos de cuatro años a los que les damos una determinada confianza. Hay que exigir. Si no, les permitimos hacer cuestiones que no deberían de hacerse.

En materia de infraestructuras, ¿tiene Soria que conformarse con la A-11 y la A-15?

Hay que conformarse con lo absolutamente necesario para la pervivencia de nuestra provincia. Hasta ahora, los gobiernos han generado modelos de comunicación y transporte para personas, pero no han buscado modelos de transformación industrial. En Soria nos hemos quedado sin una cosa y sin otra. Tampoco digo que haya que generar excesos como el aeropuerto de Castellón.

Proponen someter a referéndum a los procuradores que no cumplan su trabajo. ¿Son necesarios estos toques de atención?

Absolutamente. Un político tiene que sentir que la gente a la que representa espera que cumpla su programa y que todo lo que ha prometido se haga efectivo. Si no es así, la gente tiene que tener la posibilidad de decir que se vaya. Las personas van al circo y se ríen mucho, pero no se gobierna con la gracia.

¿Necesita la cultura soriana un impulso institucional para terminar de despegar?

Sí. Ellos inventaron lo de ‘Tierra de Sabor’. El mundo valora nuestra cultura culinaria y deberíamos aprovecharnos del bum. No entiendo por qué Francia o Grecia tienen productos de referencia y nosotros no. Creo que la gastronomía soriana va a salir adelante, estamos generando cultura. Solo hace falta un impulso regional para crear empleo.