Romance convulso en 'La República'

Pasiones, esperanzas y amores imposibles en un contexto histórico convulso regresan a la 1 como cada lunes en 'La República', a las 22.15. En 'Lo inevitable', los espectadores asistirán a un primer enfrentamiento entre Fernando y Jesús, ya que éste le pide explicaciones de lo que está sucediendo entre su amigo y su hermana Alejandra. Mientras tanto, Encarna se plantea volver con los suyos cuando recibe una oferta para trabajar en la Comisión de Reforma Agraria.

Ventura y sus camaradas planean un atentado contra el presidente de la República con el consentimiento y apoyo de Amparo. Sin embargo, en el último momento todo se complica: Ventura es herido gravemente. Amparo ha tenido un papel decisivo en este cambio de la situación y lo ha hecho en deferencia a alguien que conocen los espectadores: el hombre antes conocido como Gonzalo López de Castro.

Alejandra evita encontrarse con Fernando tras el beso y Mercedes permanece cercana y atenta a ella. Todo se complica al enterarse del sabotaje sobre las tierras, lo que contamina la vida en la casa y aviva los temores de un futuro incierto por parte del servicio. Realmente la pérdida de la siembra complicaría seriamente a la familia De la Torre, que no cuenta con el aval económico esperado para enfrentar este problema.

En la finca de Las Veguillas, Jesús, Antonio y los jornaleros guardan la esperanza de que la cal sea absorbida por la tierra y la siembra no se eche a perder. Mientras se espera lo que ocurrirá con las tierras, Alejandra y Fernando coinciden nuevamente en la finca. Fernando aclara la realidad de sus sentimientos hacia ella y Jesús, suspicaz, le pide explicaciones, lo que supone un conato de primer enfrentamiento entre los amigos de toda la vida.

Por su parte, Encarna, convencida a través de Amparo de que Ventura tuvo mucho que ver en la muerte del policía Iturmendi, se plantea seriamente la vuelta con los suyos cuando recibe una oferta para trabajar en la Comisión de Reforma Agraria. Junto a ella trabajará Alejandra.

Beatriz sublima sus deseos a través de la literatura y, para su desconcierto, sueña con su padrino; mientras, Hugo, ajeno a ninguna atracción por Beatriz, ofrece un investigador privado a Agustín para encontrar a Gonzalo López/Ramiro Villaseca.