Dos de los pesos pesados del misterio se enfrentan esta noche en un improvisado "cara a cara" con sus nuevas visiones sobre algunos misterios de la Semana Santa y de la vida de Jesús de Nazaret.

Por un lado, y a partir de la medianoche, Iker Jiménez ofrecerá una edición especial de "Cuarto Milenio", dedicada a los llamados evangelios apócrifos. A través del documental "El otro Jesús", el programa se acercará a esa otra existencia de Cristo que recogen estos legajos, rechazados por la Iglesia desde el Concilio de Trento. "El otro Jesús" recreará diversos episodios de esa vida paralela que para muchos teólogos están fundamentados en hechos verídicos que, por transgresores, fueron ocultados y excluidos por la propia Iglesia.

Iker Jiménez se hará eco también de un polémico programa sobre la Pasión, en el que la BBC presenta a un Cristo crucificado en posición fetal en lugar de atenerse a las representaciones clásicas con brazos extendidos y las piernas derechas. El Cristo del programa ha provocado el disgusto de muchos estudiosos que acusan a la BBC de "engañar" al público al hacer caso omiso de la narración de la Biblia sobre la crucifixión. A la misma hora que Jiménez comenta estas novedades en Cuatro, uno de los colaboradores habituales de su programa, el turolense Javier Sierra, estará presentando en Antena 3 el segundo episodio de "El arca secreta". Este segundo capítulo, titulado "El hombre que fabricó la Sábana Santa", intentará desvelar los secretos que guarda la más importante reliquia de la Cristiandad. Este trabajo se propone conocer los detalles de cómo y cuándo se creó la Sábana Santa de Turín, para muchos un objeto milagroso surgido durante la resurrección de Cristo, aunque para otros no es más que un fraude medieval.

La reliquia es un enigma científico que, aún hoy, tras diversos estudios, no ha conseguido explicarse de un modo plenamente satisfactorio. Pruebas como la del carbono-14 la sitúan entre los siglos XIII y XIV, y algunos estudiosos dicen que podría ser la primera fotografía realizada nada menos que por Leonardo da Vinci. Para otros, la prenda data del siglo I porque se encontraron adheridas a ella pólenes fósiles originarios de la Palestina de la época, hoy ya extintos.