Jorge Alesanco: "Ante el león hay que disimular el miedo"

Este naturalista experto en animales es el protagonista de la serie documental 'El rey de la sabana', en la que cuenta cómo fue aceptado en una manada.

Jorge Alesanco, en una imagen del documental 'El rey de la sabana'.
Jorge Alesanco, en una imagen del documental 'El rey de la sabana'.
Vocento

Un equipo de televisión quedó atrapado durante el confinamiento de los primeros meses de la pandemia en la reserva nacional Masai Mara, en Kenia. Fue el único que pudo filmar lo ocurrido en la naturaleza salvaje africana en medio de la covid. El documental 'Wild Covid, pandemia salvaje', que emite el domingo La 2 a las 20.30, narra las conductas de los depredadores ante la ausencia del ser humano. Se trata del último episodio de la serie documental 'El rey de la sabana', protagonizada por el naturalista Jorge Alesanco, quien comparte territorio con una manada de leones que le han integrado como un miembro más de su grupo.

-¿Qué le empujó a abandonar Madrid y dirigirse a la reserva Masai Mara en Kenia?

-Hace 15 años, en 2007, llegamos mi mujer y yo. Mi amor por los animales nace prácticamente cuando era un niño de tres años. Mi madre solía decir que los libros de animales eran más grandes que yo. Poco a poco, la aspiración y el interés por el mundo animal me han ido llevando a convivir con otros animales y a adquirir experiencias. Después llegó un momento en el que las circunstancias nos bendijeron para empezar con un proyecto de guepardos en Kenia y nos asentamos junto al río Mara. Fue la casualidad la que hizo que los leones vivieran allí y yo pudiera comenzar mis estudios con el mayor carnívoro de África.

-¿Qué particularidades del comportamiento de los leones les hace diferentes frente a otros animales?

-Podríamos decir que los leones son cazadores sociales, es decir, son como nosotros pudimos ser en el paleolítico y el neolítico. Componen grupos en los que la armonía está hecha por los grandes reyes, después por las madres leonas y finalmente por los cachorros que, si prosperan, pueden formar parte de la manada.

-En el documental habla también de que los leones cambian su actitud por las noches.

-Es un mito que el macho es un vago que vive a costa de las leonas. Es lo que se suele ver de día. Sin embargo, no es así. Para llegar a ser rey león ha tenido que luchar para hacerse con la manada. Hasta que consigue esto pueden pasar tres o cuatro años en los que tienen que cazar para sobrevivir porque están solos. Después, el león no caza porque sabe que cuando ha conquistado un reino tiene que preocuparse de defenderlo durante todos los días de su vida, porque hay leones nómadas que amenazan con entrar en su territorio.

-Habla de pasar 3.000 noches hasta que los leones le aceptaron. ¿Cómo ha logrado adaptarse a ellos?

-Este proceso ha durado muchísimo tiempo. Soy un científico, un etólogo. Un investigador de la conducta de los animales y un amante de la naturaleza. Ha sido un proceso lento, en el que milímetro a milímetro, noche tras noche, he ido avanzando en esta relación hasta que podemos ver, en este momento, que estoy tumbado con los leones con total tranquilidad. Ha hecho falta mucho amor por los animales.

-¿Le han demostrado algún cariño estos animales?

-Me han ocurrido cosas absolutamente mágicas. Las hembras me han llevado a los cubiles donde crían a sus cachorritos. Una vez me regalaron incluso una gacela que habían cazado. Existía una leona que no me aceptaba y las demás me defendieron. El león es un animal que puede llegar a comportarse de una manera generosa y noble.

-¿Ha temido en algún momento por su vida?

-Algunas veces sí he temido por mi vida. Son animales con grandes armas. Sin embargo, podríamos decir que el truco que he usado es demostrarles total tranquilidad, disimular mi miedo, mirarles a los ojos y ponerme de una manera más vulnerable. Al no tener tú miedo, entonces se calman. Y se crea una armonía con los leones más conflictivos.

-¿Son animales sociales?

-Las manadas de león son sociales. Hay una armonía absoluta cuando el rey león conquista y sabe que sus hijos son los que las leonas han parido. Por ejemplo, muchas veces quita la presa a las leonas para asegurarse de que primero comen los cachorros y después los adultos.

-Los machos, especialmente los jóvenes, también se muestran a veces implacables.

-Llega un momento en que las leonas están tan sometidas por los machos que rechazan incluso a sus propios hijos, a los que dejan de dar de comer. Las víctimas entonces ya no solo son los lactantes. También los cachorros medianos están condenados a morir de hambre.

-¿Y hay rivalidades con otros animales? Con las hienas parece que se llevan muy mal.

-Tienen grandes conflictos con sus mayores enemigos, que son las hienas. Sin embargo, en el clan de las hienas manda una hembra y todas las demás, incluidos los machos, le rinden pleitesía. Las hienas tienen una jerarquía muy compleja, son grandes luchadoras y muy estrategas. Son auténticas pesadillas para las leonas con cachorros.

-Cuentan que la pandemia ha acentuado los conflictos entre el humano y el león.

-Siempre hay conflictos entre el hombre y el animal. En este caso, los leones, en épocas malas, no tienen más remedio que atacar al ganado. Pero las leonas saben que es la presa exclusiva del humano. El conflicto hay que erradicarlo a través de una compensación económica por cada vaca que los leones maten. Las vacas son una riqueza aquí.  

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión