Valderrobres, calles y rincones que invitan al paseo tranquilo

Valderrobres, calles y rincones que invitan al paseo tranquilo

Su castillo, construido a finales del siglo XII, compite en prestancia con la iglesia de Santa María la Mayor.

Vista panorámica de la localidad.
Vista panorámica de la localidad.
Laura Uranga

El Puente de Piedra da la bienvenida al caminante que llega a Valderrobres con el reclamo de visitar uno de los pueblos más bonitos de España, como así lo refleja la asociación del mismo nombre que fue creada en marzo de 2011 inspirándose en entidades similares que ya existen en todo el mundo.

Su suelo empedrado ha sido recorrido por miles de viajeros que llegan a este rincón de la provincia de Teruel y se quedan admirados al asomarse a cada una de las esquinas de su casco histórico.

Calles y callejuelas que invitan al paseo tranquilo y sosegado mientras se disfruta de edificios civiles tan representativos como El Palau, bello ejemplo de arquitectura gótica; la Fonda de la Plaza, que conserva sus maravillosas almenas y las gárgolas; la vieja cárcel medieval; o el Torreón de Valentinet que, aunque se encuentra en ruinas, sigue evocando la prestancia de épocas mejores.

Alzando la vista hacia la parte más alta de la localidad, se levanta su castillo, que preside majestuoso y que presume de ser una de las principales fortalezas de época gótica que existen en Aragón.

Construido a finales del siglo XII, el recinto, que fue remodelado en la década de los ochenta del siglo pasado, cuenta con numerosas dependencias, entre las que destacan la sala de las Caballerizas, la sala Capitular, el salón de las Chimeneas, una gran cocina, la sala de los Leones y la Cámara Dorada.

Otro edificio civil muy representativo es la casa consistorial, que fue construida a finales del siglo XVI y se sitúa en la plaza de entrada a la fortificación medieval que rodea la ciudad.

En el caso de los edificios religiosos, es obligada la visita a la iglesia de Santa María la Mayor, que comparte el protagonismo en la zona más alta del casco antiguo, desde donde domina todo el valle. La iglesia cuenta con una sola sola nave, siguiendo el modelo noreuropeo, con tres tramos y capillas laterales en cada uno de ellos, excepto en el segundo, donde está la portada. En la clave de bóveda aparece Santa María la Mayor flanqueada por dos ángeles alados.

El apunte: el vuelo del buitre

Entre las múltiples actividades que se pueden hacer al visitar Valderrobres se encuentra la posibilidad de disfrutar del día a día de una enorme colonia de buitres. Todo ello gracias al trabajo que se desarrolla en Mas de Bunyol, un observatorio de buitres construido encima de una masía. La visita guiada se realiza los 365 días del año.

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