Mi vestido de novia: tendencias que no hay que perder de vista

La elección del vestido de novia es, sin ninguna duda, una de las tareas más difíciles antes de la boda, pues, además de requerir de una estrecha

colaboración entre la protagonista y todas las personas de su entorno que quieran ayudarle a dar con el modelo adecuado, exige paciencia, ganas y un gran control de una serie de variables esenciales que ayudarán a dar con el modelo perfecto para cada una.

Para empezar es fundamental pensar en el tipo de ceremonia que se va a celebrar, ya que ayudará a decidir el estilo del vestido. No está de más hacerlo acorde al presupuesto del que se dispone, para evitar sustos de última hora y recortes en la luna de miel.

Otra de las cuestiones a tener en cuenta es el tiempo: la mayoría de fabricantes tardan un mínimo de cuatro meses en hacer los arreglos pertinentes; aunque, si fuese necesario, en numerosas tiendas hacen cambios exprés por un poco más de dinero.

Las tendencias son fundamentales para dar con el atuendo ideal: cada año se incluyen una serie de detalles que conviene tener en cuenta, pero sin

olvidar que lo realmente importante es darle un toque personal para sentirse única y perfecta en el gran día.

¿Qué dicen las últimas tendencias? Cropt-top y manga larga. El crop-top ha entrado pisando fuerte en los armarios nupciales. Y es que esta prenda, habitual para completar los trajes de novia de dos piezas, permite combinar un sinfín de acabados,

ya sean bordados y encajes, finales festoneados o segundos cuerpos con transparencias y brillos, perfectos para las novias de entretiempo que prefieren casarse de noche.

'Streetwear' y desenfadado. Atrevido, desenfadado y con mucho vuelo. Así es la nueva propuesta que arrasa en las bodas civiles y que sigue ganando adeptas cada temporada. De colores pastel y con encajes y algún que otro lazo (otro de los 'must' de la próxima temporada de vestidos de novia), este modelo dejará sin palabras a todos los invitados a la ceremonia. Sin volantes, no hay vestido. Para las futuras novias, los volantes vuelven a ser un elemento imprescindible. Da igual el tipo de ondulaciones que sean, o si se llevan en tirantes, escotes o de forma asimétrica en los bajos del vestido para crear una cola de sirena singular.

Eso sí, dejar de lado los faralaes es una buena decisión, pues los acabados minimalistas son los que marcan la temporada.

Escote infinito, arriba y abajo. Los escotes en los vestidos de novia rara vez faltan en las colecciones de las firmas más prestigiosas; aunque dar con el que más favorece no siempre es sencillo y pedir ayuda a un asesor de moda nunca está de más. Para esta temporada, hay que tener

en cuenta las aperturas en la espalda, y también en la falda para darle un toque atrevido, pero sin dejar de lado la elegancia.

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