Nuevas tendencias del sector: la logística verde

Reducir el impacto de las emisiones causado por el transporte es la base del desarrollo de la llamada 'logística verde'. Con este término se alude a una transformación integral de las estrategias de la logística, sus estructuras, procesos y sistemas, sirviendo para crear procesos ambientalmente racionales y realizar un uso eficaz de los recursos.

Disminuir los kilómetros recorridos por los vehículos es un modo de lograr de manera directa una reducción en la emisión de gases. Así, la logística, al optimizar la planificación de los recorridos y gestionar los tiempos de entregas a fin de poder unir cargas y evitar que los camiones vuelvan de vacío o quede sitio libre en sus remolques, se presenta como el instrumento idóneo para una organización inteligente y eficiente del transporte de las mercancías.

Esa eficiencia no solo contribuirá a hacer menos contaminante la actividad de transporte sino que, igualmente, supondrá ahorros económicos visibles en combustible y otros recursos. Entre los desarrollos encaminados a alcanzar esos objetivos ‘verdes’ se encuentra la automatización de la gestión de las flotas o el diseño de un software de control y vigilancia que contribuyan a la mejora logística del sistema.

Pero la logística verde no solo se refiere al transporte, pues existen otros campos en los que lograr la sostenibilidad: el almacenamiento de productos peligrosos por ejemplo. También un inadecuado proceso de descarga puede provocar que la mercancía sufra daños, contaminando aún más. Finalmente, a veces el empaquetado se hace en sucesivas fases, con un consumo excesivo de recursos; además, el plástico y otros materiales tienen un difícil proceso de degradación.

Más retos: la logística en la ciudad

¿Qué es la logística urbana? Englobaría el transporte en todas sus acepciones (transporte público, tráfico, aparcamientos, peatones, motos, bicicletas, etc.), el transporte de mercancías, los servicios de correos, los de limpieza, los de riego y mantenimiento de las calles, la recogida de basuras, los servicios de respuesta rápida (policía, bomberos, asistencia médica, etc.), las operaciones de mantenimiento de las redes de infraestructuras básicas urbanas, la gestión de parques y jardines y los servicios de nueva generación derivados del avance tecnológico en informática y telecomunicaciones (venta vía telefónica y el comercio a través de internet o 'e-commerce').

¿Cómo se gestiona? La aplicación de las tecnologías de la información y la comunicación, junto con otros procedimientos de innovación tecnológica resultan esenciales para el rediseño de los espacios urbanos.

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