" Religiones raras e impuestos sacrílegos "
Cuando "vuelas" por la historia te encuentras con manifestaciones humanas de lo más pintorescas, más aún cuando estas sobreviven en el tiempo. En este caso me refiero a los miembros de una secta religiosa rusa, fundada a mediados del siglo XVIII cuando se separó de la Iglesia Ortodoxa Oriental, los 'Dujobores'.
Los "dujobors" aspiraban a la comunicación directa con Dios, creían y creen en una luz interior y predicaban los éxtasis religiosos y la glosolalia (hablar en lenguas extrañas). Fueron muy perseguidos por la Rusia zarista, ya que se negaban a reconocer la autoridad estatal. A finales del siglo XIX, León Tolstoy consiguió que cerca de 8.000 miembros de esta secta fueran trasladados a un territorio deshabitado de Canadá. En la actualidad, los dujobors, tampoco son bien vistos por las autoridades de este país, ya que entre sus prácticas siguen con la negativa a pagar los impuestos.
Parece que llevan a rajatabla aquello de "Que Dios te lo pague"...