Blog - Al Alba

por Mariano Gistaín

La hernia

España está en estado de hernia.


El Rey debería operarse en el hospital sin mantas que nombró Candela Peña.


El Rey debería entrar en la lista de espera para recuperar la proverbial campechanía y devolver la popularidad al régimen.


Con ese gesto la transición estaría salvada. Sería un gesto heroico, de jugarse la vida, como corresponde a un militar en momentos de gran quebranto patrio.


-Privaticen mi hernia. ¡Por España!


Ese gesto temerario ya indultaría al yerno, que podría volver al Museo de Cera y a la web.


Para salvar al régimen de los sobres basta con hacer como si no pasara nada. Eso Rajoy lo hace genial. Pero luego hay que restaurar la confianza interior, o sea, el propio mecanismo de intercambio bajomanero. Porque el trasiego debe continuar. El trasiego sin iva es la esencia del sistema. Lo demás es confeti.


La dación en Loewe no puede parar.


La hernia, si se gestiona bien, puede restaurar el honor del establishment. Y aligerar las listas de espera.