Recortado en días y presupuesto –los tiempos mandan- y desgajado de las fiestas del Pilar, echa a andar mañana el FIZ, el Festival Independiente de Zaragoza, con un solo día de duración y un cartel entre indie y 'establecido'. James, no se olvide, es grupo de la factoría Mercury (Universal), o sea, de una factoría que poco tiene de indie, como sí la tuvo Factory y Rouhg Trade, donde en varios instantes picoteó el grupo de Manchester, aunque, insisto, el grueso de su producción está en Mercury.

No es pues un grupo, James, estrella del cartel, de acomodo indie y quizá ya muy veterano para estos menesteres, pero vete a saber qué es válido y qué no es válido en un festival independiente, cuando Leonard Cohen ha pasado por el FIB. Quizá sea lo de menos. Lo importante es que se trata de un gran e histórico grupo de pop, surgido de la cantera mancuniana, mosquetero de la quinta de Happy Mondays, Inspiral Carpets, Stone Roses…, con un sonido tan bailable como sutil y delicado. En su momento de esplendor fue llamado a sustituir a The Smiths (Morrissey los adoraba y no faltó la etiqueta: los nuevos Smiths).

Siempre recordaré su lujoso álbum 'Seven' (1992), con aquel inicio en la cara A a lo Simple Mind, que hacía torcer un poco el gesto, pero en la cara B había un tema tranquilo que masajeaba los oídos como pocos, es decir, 'Don' Wait That Long', y todo el álbum mostraba un brillo y una tersura pop admirables.  Y luego, estaban aquellos turbadores arreglos de trompeta... Sigue siendo mi favorito junto con 'Gold Mother' (1990), que dos años antes, me había comprado en la HMV londinense. Otro de sus excepcionales discos, más peculiar, atrevido y variado, con canciones que me recordaban a Patti Smith ('Hang On') y el resto pintando un lienzo más que sugerente y caleidoscópico: 'Walking The Ghost' en plan psicodélico; la trepidante 'God Only Knows', un rockabilly disfrazado de himno de estadio; la nocturna 'Crescendo'; la misma 'Gold Mother' en un insólito y vacilón ropaje funky-dance o la plasmación del sonido disco 'madchesteriano' de 'Come Home'. Obviamente, allí no estaba el gran hit de los mancunianos, 'Sit Down', que tras salir en single se incorporó a la reedición del mismo álbum, en 1991.

En 1993, editaron otro buen álbum, bajo la dirección de Brian Eno, 'Laid', y en el paso de la década de los noventa a la del 00 James despachó otros dos de sus grandes discos: 'Millonaires' (1999) y 'Pleased To Meet You' (2001). No obstante, pese al sonido pegado a U2, Simple Minds, Echo & The Bunnymen, Stone Roses, Waterboys, Smiths…, no logró nunca establecerse como gran-gran grupo del pop inglés de los 80-90, mucho menos en el grupo de estadio que vaticinaba la prensa británica, lo que derivó en largas ausencias, conflictos internos y numerosas entradas y salidas en la formación.

Es, ya digo, la estrella de este mini FIZ, pero mucho me temo que quien realmente está tirando y tirará mañana del festival será el núcleo duro y numeroso de los fieles de Vetusta Morla, el grupo trescantiano que con su segundo disco ha subido aún más enteros en la bolsa del pop. Standstill, Delorean y Triángulo de Amor Bizarro serán buenos compañeros nacionales de viaje en este FIZ (y añado los sulfurosos y estupendos Faith Keepers zaragozanos, que se me pasaron, sorry)  que, con la que está cayendo, es casi un milagro su mera pervivencia. ¿Tienes ya entrada? Pues ya contarás.