El mundo perdido de los dinosaurios
Ciencia. El clima aragonés era cálido y tropical en la era de los dinosaurios. Ninguna de las plantas que crecían en aquella época ha llegado hasta nuestros días, excepto parientes lejanos, como la araucaria, el ginkgo, cipreses, magnolias o helechos. Las plantas con flores tardaron en llegar y durante millones de años los dinosaurios tuvieron que alimentarse de coníferas. ¿Cómo era posible que animales de un tamaño tan descomunal lograran sobrevivir con plantas de tan escaso valor nutritivo? Tras varios experimentos, biólogos alemanes y suizos han llegado a la conclusión de que algunas de las plantas típicas del Jurásico aportaban grandes cantidades de energía gracias a las bacterias que habitaban los estómagos de los dinosaurios. Para realizar el estudio, fabricaron un estómago artificial que poblaron de bacterias gástricas de oveja, para imitar la 'cámara de fermentación' que tienen los herbívoros. Cuando se introdujeron en ese estómago ramas de conífera, se comprobó que la cantidad de energía liberada era igual o mayor que la de plantas de hoja ancha típicas de la era actual.
UN MUNDO PERDIDO
>> Cicadáceas. Parientes lejanos de las palmeras, abundaron en el Mesozoico, hace unos 200 millones de años. Crecían en el continente del norte, llamado Laurasia, y suponían una fuente de alimento fundamental para los grandes saurios. Sus descendientes actuales son las cycas, que crecen en las selvas asiáticas.
>> Cola de caballo. El equisetum es una planta muy poco evolucionada que ha perdurado hasta nuestros días. Es casi idéntica a la que crecía en el territorio aragonés hace 400 millones de años. El análisis de dientes de dinosaurio fosilizados ha permitido deducir que formaba parte importante en su dieta.
>> Helechos gigantes Se sabe que la época de los dinosaurios no conocía el hielo porque en las zonas más cercanas a los polos abundaban los helechos gigantes, cuya fisiología no les permitía tolerar las heladas. Su reproducción, por esporas y muy rudimentaria, la conservan los helechos de la actualidad.
