De cara a los mundiales caninos cada país tiene una serie de normas que tanto los atletas como los guías deben cumplir. A continuación se muestran cuatro reglas básicas que, según el presidente del Club Agility L'Almozara de Zaragoza David Molina, serán indispensables para poder participar en el Campeonato Mundial de Zaragoza.

1. Pasar por el veterinario

Durante el campeonato los encargados de reconocer a todos los atletas serán los profesionales de las clínicas veterinarias Miralbueno-Goya ayudados por los de la Facultad de Veterinaria de la UZ. "De este modo nos aseguraremos de que todos los perros están sanos y que nadie intenta pasar a un can por otro durante la competición, para lo que también revisarán los chips", explica Molina, quien no se olvida de recordar que "si vemos algún tipo de anomalía o riesgo, no permitiremos su participación".

2. Más de 18 meses

En palabras del presidente del Club Agility L’Almozara de Zaragoza: "Hay que respetar en todo momento el desarrollo físico de los cachorros y velar por su salud. Someterles a entrenamientos duros a una temprana edad podría suponer un riesgo grave para el perro, ya que no hay que olvidar que durante la competición los atletas deben dar saltos y piruetas a una velocidad de hasta 5 m/s". Gracias a esta norma, "podemos velar por el bienestar de todos los competidores, algo fundamental para todos los que amamos este deporte", añade.

3. Entrenamientos positivos

Entre las reglas básicas "hay una que me encanta, ya que preserva el bienestar de los perros", afirma Molina, quien continúa explicando que "es la que prohibe a los entrenadores menospreciar o ejercer violencia sobre su mascota". Si  se da un caso así durante la competición, "no solo se eliminará al entrenador en esa manga, si no que también será expulsado de la competición. Y es que no hay que olvidar que el Agility está basado en aprendizaje en positivo: el perro no obedece por sumisión sino porque le encanta lo que hace con nosotros".

4. Recorrido sorpresa

El día del Mundial, la improvisación, la agilidad física y mental y una buena conexión entre los perros y sus entrenadores serán claves para ganar. Y es que "el recorrido en el que el equipo deberá demostrar sus aptitudes deportivas se conoce tan solo unos minutos antes de que comience el campeonato", advierte David Molina. Los guías –sin perros– tendrán ocho minutos para reconocer el recorrido y memorizarlo, pues "para conseguir una buena marca es fundamental seguir el orden de obstáculos marcados por el juez".

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