​Fiestas, revanchas y maldiciones a batir para una final de Champions

​Fiestas, revanchas y maldiciones a batir para una final de Champions

Independientemente del resultado, Madrid el sábado será una fiesta y de las grandes.

Sergio Ramos y Diego Costa pelearán por la Champions
​Fiestas, revanchas y maldiciones a batir para una final de Champions

Sí, 'París era una fiesta', según decía Ernest Hemingway en una novela, pero Madrid aún lo será más este sábado con sus dos equipos jugándosela a una mano en el estadio de Giuseppe Meazza, de Milán, más conocido como San Siro. Para más inri, el encuentro tiene un sabor de revancha, pues el Atlético no olvida que en 2014, los merengues les apearon de muy malas formas de su sueño europeo. Pero también hay una maldición en esta historia como luego desentrañaremos.


En aquella final lisboeta, hizo falta una prórroga que culminó con un 4-1 para que los colchoneros entendieran de una vez por todas que aquella Copa no era para ellos. Pero he aquí que dos años después el destino, pero sobre todo su buen juego, les da una segunda oportunidad: ¿será tan cruel para volver a negarle la victoria?


Lo cierto es que solo han sido dos años, pero mucho han cambiado esos dos equipos desde su vis a vis en Lisboa. Para empezar, Zidane es ahora el que comanda las huestes madridistas, aunque no pasa lo mismo con los colchoneros donde Simeone es un rey indiscutido desde 2011.


También los jugadores han cambiado, así que muchos han levantado el vuelo como Miranda que ya no engrosa las filas rojiblancas y otros nuevos, como Keylor (Real Madrid) y Oblak (Atlético), serán los que montarán guardia ante sus porterías, cuando en la final lisboeta esa misión se le asignó a Iker Casillas y Thibaut Courtois.


Pero si nos fijamos en el currículum de adversarios en la Champions, aunque no hay rival pequeño -y sin querer incurrir en un alegato colchonero- encontramos que el Atlético de Madrid ha tenido que librar las más grandes batallas y en su haber figuran victorias ante el Barcelona o el Bayern de Múnich.


Mientras que el cuadro de contrincantes de los merengues no resulta tan impresionante ni de lejos, mal que les pese, pues sus disputas sobre el césped han sido ante el AS Roma o Wolfsburgo.


¿Han reparado en estas circunstancias los seguidores? Pues parece que no, pues la balanza tiende hacia el madridismo. Así, un 22,8% confía en una victoria del Atlético y un 47,1% se decanta por el empate. Lo cierto es que estamos ante dos equipos de rompe y rasga y el aficionado lo tiene muy difícil para acertar en su pronóstico de apuestas.


Por su parte, un 30,1% apuesta por el empate, aunque este resultado es imposible, ¡pues solo puede quedar uno! Sin embargo, quizás los apostantes no han tenido en cuenta el factor de mal fario que para el Real Madrid supone el estadio de San Siro, pues su saldo de derrotas en Milán es abrumador.


En este sentido, en dicho estadio ha disputado catorce partidos y no ha ganado ni uno. ¿Acaso la ciudad espanta los goles merengues? Parece que al Real Madrid le gusta batirse con los enemigos a pares: el Atlético y la maldición de San Siro.


Independientemente del resultado, Madrid el sábado será una fiesta y de las grandes.