El pleno del Ayuntamiento de Zaragoza ha obligado a Zaragoza en Común a abonar a las arcas públicas los gastos del acto de rendición de cuentas que celebró en el Auditorio de la ciudad para conmemorar sus primeros cien días al frente de la ciudad y que el Grupo Popular ha estimado en más de 3.000 euros.

Esta moción, presentada por el PP, ha salido adelante con los votos favorables de populares, socialistas y CHA, el único rechazo de ZeC y la abstención de Ciudadanos.

El edil popular Pedro Navarro ha recordado al alcalde que "el Ayuntamiento no es suyo" y ha denunciado que es "la primera vez" que un partido "cierra la sala Luis Galve, llena las radios de cuñas y no paga ni un duro".

Por ello, ha exigido a ZeC que "pague", como hace el resto de formaciones políticas cuando hace uso de instalaciones similares, o incluso otras asociaciones como Unicef, Atades o la Asociación Española Contra el Cáncer.

Por su parte, el consejero municipal de Economía y Cultura, Fernando Rivarés, ha defendido a su grupo, ZeC, aduciendo que este acto formaba parte de una obligación asumida en la campaña electoral, que incluye un evento anual presidido por el alcalde, como el del pasado viernes en el Auditorio, y uno mensual de los concejales en un equipamiento público, y ha animado al resto de grupos a hacer lo mismo.

Asimismo, para defender el carácter institucional y no partidista del acto, ha señalado que al mismo acudieron personas "nada afines" que estuvieron haciendo preguntas.

Javier Trívez (PSOE) ha indicado que no hay que poner impedimentos en la rendición de cuentas y ha centrado su exposición en si el acto en sí era "institucional o partidista, de gobierno o propagandístico".

En su opinión, fue "partidista" porque los gobiernos ya cuentan con las instituciones y, por ello, no acudió ningún representante del resto de grupos más allá de varios diputados de Podemos.

Ha denunciado que las cuentas de las redes sociales del Gobierno de la Ciudad y de ZeC están "casi sincronizadas" y ha considerado "inadmisible" que el alcalde dijera que solo gastaron 150 euros en micrófonos, sin tener en cuenta las tasas municipales a abonar por utilizar estos espacios públicos, por ejemplo, y le ha pedido que rectifique.

En la misma línea, Sara Fernández, de Ciudadanos, ha coincidido en que no van a criticar que el gobierno rinda cuentas porque es "su obligación" pero, para ello, ha animado a Santisteve a comparecer en el pleno para hacerlo.

Del mismo modo, ha instado a ZeC a "cuidar las formas" porque "se pueden romper matrimonios" y "el noviazgo" con CHA y PSOE se está deteriorando.

La concejala de CHA Leticia Crespo también ha compartido que se trató de un acto "absolutamente partidista" que no le gustó "nada" y que el grupo que sustenta al gobierno debería pagar las tasas por la utilización del Auditorio, así como no haber utilizado a voluntarios del consistorio para el evento y no confundir "gobierno con partido".