Vestidos de novia anticrisis

La compra de segunda mano en portales webs o en outlet son la opción elegida de muchas novias.

Vestidos de novia anticrisis
Vestidos de novia anticrisis

La ilusión se mantiene, pero casarse en tiempos de crisis supone, para muchos, un problema. Hacer frente al coste de una boda se hace cuesta arriba. Y es que la lista puede ser interminable: cáterin, fotógrafo, flores, viaje de novios, traje, etc. En Aragón, el coste medio de una boda ronda los 12.000 euros, según la Federación de Usuarios y Consumidores Independientes. Y la media nacional se sitúa en los 13.200 euros.


De esta manera, los ciudadanos buscan la alternativa más económica para seguir dando el 'sí quiero'. Una de las opciones a las que más se recurre es la compra de vestidos de novia de segunda mano o outlet. José Luis tiene una tienda de vestidos de novia en la calle Don Jaime y asegura que, con la llegada de la crisis, "las clientas que piden vestidos outlet han aumentado un 35%". Sin embargo, a pesar de este incremento, dice que "la mayoría prefiere estrenar". 


Pero la diferencia de precios es importante. Un vestido nuevo puede costar entre 500 y 3.000 euros. Si es de outlet, el precio oscila entre 300 y 1.000 euros, según cuenta José Luis. Eso sin contar con accesorios, peinado y maquillaje. 


"En países escandinavos existe la cultura de alquiler de vestidos de novia. En Zaragoza somos tradicionales. Salvo que sea cuestión de necesidad, tanto mujeres como hombre prefieren comprar un traje nuevo", cuenta José Luis. 


La tradición de guardar el vestido de novia en el armario parece condenada a desaparecer. En varios portales de compraventa como Milanuncios o Segundamano.com existen más de 250 anuncios, solo en Zaragoza, dedicados a la venta de vestidos de novia usados y accesorios de ceremonia. 


"Se vende vestido de novia en buen estado, comprado en Estados Unidos. Talla 38", reza un anuncio. María M. explica que vende su vestido porque quiere hacer hueco en su armario. "Es una prenda que solo usas una vez. No tiene sentido guardar. Además, así me saco un dinero extra", explica María, que critica "los precios desorbitados" de este sector. "Ahora no me gastaría tanto dinero si volviera a celebrar mi boda", asegura. 


Rosa, vecina de las Fuentes, también vende su vestido blanco. Dice que sí siente nostalgia al deshacerse de él. Lamenta no recuperar el cien por cien de la inversión que hizo: "Los vendes por la mitad o menos", asegura. Su vestido ya tiene compradora. "Aunque necesite el dinero, creo que es beneficioso este intercambio. He ayudado a otra persona a cumplir su sueño de casarse por menos dinero", señala. 


Pero más allá de los anuncios en webs, cada vez más personas apuestan por acudir a una modista. Los arreglos en tiendas de vestidos de novia y comunión rondan los 200 euros. Lucía López lleva más de 20 años en el sector de arreglos de vestidos de novia en Zaragoza. "La crisis ha hecho mucho daño", se lamenta. López cuenta que muchas clientes vienen con la intención de arreglar los vestidos que les proporcionan sus conocidos o los que compran de segunda mano. "Los arreglos salvaron nuestro negocio. La gente está concienciada. No todo el mundo se puede gastar más de 2.000 euros en un vestido nuevo", concluye.