Acusan a un productor de anuncios de no pagar el rodaje de un 'spot' en Grecia

José Manuel Monegal, productor de audiovisuales, se sentó ayer en el banquillo de los acusados como presunto autor de un delito de estafa o, alternativamente, uno de apropiación indebida. El imputado, administrador de la empresa Ekenge Film, se enfrenta a una petición el fiscal de tres años de cárcel y una multa de 13.500 euros, penas que la acusación particular, ejercida en nombre de los perjudicados, eleva a cuatro años de prisión, pero deja la cuantía de la multa en 12.000 euros. Tanto el abogado defensor del acusado, Jorge Civis, como la letrada que representa a la empresa Ekenge Film, Beatriz Morancho, solicitaron la absolución ya que consideran que este asunto se trata de una cuestión civil y lo que existe es una "discordancia" en las cuentas.

Los hechos juzgados se remontan a octubre de 2009, cuando la empresa Avion Films, con sede en Grecia, contrató a Ekenge Film para que realizara un ‘spot’ de Jumbo. Las dos mercantiles acordaron verbalmente el trabajo, por un precio de 64.400 euros. De esta cantidad, el director artístico, Tony Milanés (uno de los padres del anuncio del Gordo de la lotería) tenía que cobrar 24.000 euros.

El rodaje se hizo en Grecia pero la posproducción se llevó a cabo en Zaragoza y como se decidió que para el anuncio era necesario incorporar efectos digitales, Ekenger contrató los servicios de la empresa zaragozana Entrophy Zero, puntera en este ámbito. Según se puso de manifiesto ayer en el juicio, el acuerdo –también verbal– por estos trabajos fue de 40.000 euros.

El proyecto se ejecutó a satisfacción de la empresa griega, que abonó mediante transferencias a Ekenge Film todo el dinero acordado, es decir, los 64.400 euros. Sin embargo, esta última, según el fiscal y las acusaciones, se quedó con toda la cantidad y no pagó ni al director artístico ni a Entrophy, que ahora se la reclaman y lo acusan de estafarles. 

José Manuel Monegal negó ayer este extremo y dijo que del precio que pactó Ekenge con Avion Films, un 20% respondía al beneficio industrial (comisión) para su productora y 6.000 para él como productor ejecutivo. Añadió que envió 10.000 euros a Tony Milanés y que la empresa griega le pagó a este último otros 3.000. Subrayó que Entrophy cobró 24.000. 

Los perjudicados negaron totalmente haber recibido dinero alguno por el trabajo que desarrollaron a lo largo de dos meses. 

Uno de los socios de la empresa de Entrophy ratificó que cuando se dieron cuenta de que José Manuel Monegal no respondía a sus pretensiones de cobro comenzó a llamarle y este empezó a "darle largas" y a decirle que a él tampoco le habían abonado por el trabajo. 

"Al final me puse en contacto con Avion Films como una forma de presión para que le pagara a Monegal y éste pudiera pagarnos a nosotros, pero mi sorpresa fue que la empresa griega me dijo que ya había satisfecho todos los pagos y me envió las copias de las transferencias hechas semanas atrás", señaló el socio de Entrophy, a preguntas de su letrada Mercedes Arraiza. 

El legal representante de Avion Films, que se desplazó desde Grecia para declarar en el juicio celebrado en la Audiencia Provincial, confirmó que él trató en todo momento con José Manuel Monegal y su empresa Ekenge y nunca habló con Entrophy. 

Por su parte, Tony Milanés, representado por Pedro Júlvez, admitió que el acusado le hizo un ingreso de 10.000 en una cuenta de su hermana pero que fue en enero de 2010 y en concepto de otros trabajos que le debía anteriormente.

Para los defensores, no existe ninguna estafa puesto que no hubo ninguna maquinación y, en el caso de que hubiera algo, la responsabilidad sería de Ekenge, no de José Manuel Monegal.