Bodas de plata en la Fiesta de la Garnacha

La Denominación de Origen del Campo de Borja cumple su vigésimoquinto aniversario y lo hace entre buenos augurios de calidad y cantidad y con el pisado de las primeras uvas que se convertirán en uno de los vinos más apreciados a nivel internacional

Alba y David Pardo se preparan para el pisado de las uvas en compañía de la reina de la vendimia y las reinas de las fiestas.
Bodas de plata en la Fiesta de la Garnacha
Guillermo Mestre

Diecisiete bodegas, dieciséis pueblos y casi cuatro décadas de historia de una Denominación de Origen, la de Campo de Borja, que ayer celebró en Ainzón las bodas de plata de la fiesta con la que se da comienzo oficial a la vendimia. Un 25 aniversario cargado de buenas expectativas por la cantidad y calidad de la uva que se espera cosechar. Y con el referente de la variedad que da nombre a todo un imperio: la garnacha. 


Para llegar al vino que ha enamorado a algunos de los olfatos más prestigiosos del mundo, cada año hay que probar primero su mosto. Y, por eso, un grupo de niños fueron los encargados de llevar en sus cestas las uvas para preparar este primer caldo. Estos niños "son el futuro de estos vinos", como los definió la periodista Adriana Oliveros, mantenedora de la fiesta. Unos pequeños que también representaban el futuro de los 16 pueblos que componen la Denominación de Origen: Agón, Ainzón, Alberite de San Juan, Albeta, Ambel, Bisimbre, Borja, Bulbuente, Bureta, El Buste, Fuendejalón, Magallón, Maleján, Pozuelo de Aragón, Tabuenca y Vera de Moncayo. 


El grupo de jotas de Fuendejalón puso la voz y la melodía de nuestra tierra que acompañaron a Alba Pardo y David Pardo en el tradicional pisado de las uvas. Vestidos con traje regional, estos jóvenes fueron los encargados después de prensar la uva. La reina de la vendimia de este año, Julia Bayona, recogió el primer mosto con el que después brindaron las autoridades. 


En el escenario donde se desarrolló el acto central, había representantes de la Denominación de Origen, del Ayuntamiento, de la comarca, de la Diputación Provincial de Zaragoza, del Gobierno de Aragón y el obispo de Tarazona, Eusebio Hernández. Desde abajo, asistiendo como público, otros muchos regidores municipales de la zona y del mundo del vino. 


El presidente del Consejo Regulador de Campo de Borja, Eduardo Ibáñez, abrió el turno de intervenciones: "Somos un territorio único con un producto y patrimonio humano excelentes". Hizo un repaso por la vinculación histórica del vino con el monasterio y las bodegas de las faldas del Moncayo. "Tenemos un presente prometedor en calidad y comercialización", añadió Ibáñez. 


Los datos lo demuestran. En esta cosecha se esperan recoger 30 millones de kilos de uva, una cifra un 60% superior a la del año pasado. "Un verano suave ha permitido una maduración tranquila de la uva", explicó el presidente del Consejo. Estas cifras contrastan con las de 2013, cuando se recogieron 18 millones de kilos, debido a los graves daños del predrisco. El granizo este año ha afectado a unas 300 hectáreas de cultivo, lo que merma la cosecha en torno a 1,5 millones de kilos.Un vino internacional

"Los vinos de Campo de Borja van paseando por 49 países del mundo", añadió el presidente del Consejo Regulador. El 75% del vino se vende al exterior siendo Estados Unidos, Reino Unido, Alemania y Holanda los principales importadores. Aunque a la lista se han incorporado recientemente otros como Japón. La estimación de ventas para este año es de 19 millones de botellas, es decir, más de 13 millones de litros de vino. 


"Nuestro proyecto no es fácil, la lucha tampoco", concluyó Ibáñez. El presidente del Consejo Regulador aprovechó para recordar al departamento de Agricultura lo necesario que es su apoyo. Por su parte, el alcalde de Ainzón, Javier Corella, también hizo uso de la palabra para solicitar la limpieza urgente de los cauces de los ríos. 


Los aplausos que pusieron fin al acto sirvieron para agradecer a todas las personas que, desde el campo, los laboratorios o las bodegas, luchan por mejorar los vinos. Después, los asistentes a la fiesta pudieron disfrutar de un vermú popular en el pabellón polideportivo municipal. 


Esta zona es conocida sobre todo por sus vinos de uva garnacha y, por eso, el próximo viernes se celebrará en Borja el Día Internacional de esta variedad de uva, tan apreciada a lo largo del mundo. Para esta celebración se han preparado numerosas actividades, entre las que destaca el ‘Garnacha Bus’. Este autobús, que saldrá desde Zaragoza, ofrecerá una visita teatralizada a la ciudad de Borja. También tendrá lugar una marcha nórdica entre viñedos.