Durante casi seis años, la Torre del Agua ha vivido sin el atractivo que la convirtió en uno de los referentes más importantes de la Expo de Zaragoza de 2008: el Splash. Un icono que desde ayer los zaragozanos pueden volver a visitar de forma gratuita hasta el día 12 de octubre. La Asociación Legado Expo es la encargada de gestionar estas visitas guiadas y las que se programen para después del Pilar, para las que aún no se ha fijado ni el precio ni las fechas. De momento, pueden acceder tres grupos de veinte personas a la Torre del Agua de 10.00 a 13.00 y durante treinta minutos para contemplar la maravilla del Splash. 

El regreso de este emblema de la capital aragonesa ha tenido una gran acogida entre los zaragozanos, que ya han formalizado más de quinientas reservas, obligando a colgar el cartel de completo tanto este fin de semana como el siguiente.

Tras la entrada de los primeros visitantes de la mañana, el guía los condujo hasta la undécima planta de la torre, donde les explicó las características y curiosidades del Splash, una escultura que tiene 23 metros de altura y más de nueve de diámetro.

Ante la expectación de los visitantes, fue explicando una a una todas las curiosidades de esta obra que destaca por su riqueza visual. Mientras que desde el suelo se ve una superficie plana –el momento en el que el agua choca con el suelo–, al rodearla se diferencian puntos de vista muy diferentes de cada salpicadura.

Mientras que para algunos era la primera vez que entraban en la torre, otros reconocieron haber estado anteriormente. Es el caso de José Martínez, que se enteró «por las redes sociales» y decidió volver «por su imponente estructura y la vuelta al edificio de la gota de la Expo». Además destacó, como muchos otros asistentes, ciertas dudas ante el futuro «aprovechamiento de la torre y de la zona Expo en general». 

Este es uno de los mayores interrogantes entre los ciudadanos en torno al edificio y al que todavía no ha podido darse una respuesta concreta. La responsable de la Torre delAgua, Teresa Alós, indicó que «existen varios proyectos de futuro para poner en valor la torre» como reclamo y emblema de la ciudad de Zaragoza.

Lo que está claro, a la vista de los datos, es que la iniciativa de visitar el Splash está siendo un éxito, por lo que se está a la espera de estudiar una ampliación del calendario de visitas, aunque todo se condicionará al número de asistentes, las actividades que se realicen y al uso futuro que se le pueda dar a la torre. En este aspecto, el consejero de Obras Públicas, Rafael Fernández de Alarcón, ya anunció el pasado mes de junio que se hará una convocatoria pública abierta para que los empresarios propongan posibles actividades en el edificio.

Aunque Teresa Alós reconoció que ya hay un proyecto «muy avanzado» para la planta cero, que cuenta con cerca de 2.800 metros cuadrados y «muchas posibilidades de uso». Uno de los espacios al que también se le pretende dar un uso diferente es la planta 23, que cuenta con un privilegiado mirador a la zona de la Expo y a la ciudad en general. Las reservas para las próximas visitas a la Torre del Agua se pueden hacer ya en la página www.ticketea.com.