Rebajas con "brotecillos verdes"

Las grandes superficies se sumaron ayer a la campaña de rebajas en una jornada en la que hubo "más animación que aglomeraciones". Si el tiempo acompaña, las ventas de ropa y calzado podrían incrementarse un 5%

El Corte Inglés de Sagasta, al abrir las puertas ayer.
El Corte Inglés de Sagasta, al abrir las puertas ayer

No fueron avalanchas enloquecidas a la búsqueda de la ganga perfecta, pero sí hubo algún que otro tímido codazo y algún empentón de soslayo en el primer día de rebajas de las grandes superficies. Así, con esta misma sutileza, es como parece que se va recuperando el consumo, que se despereza trasmeses y meses de caídas y sugiere una mejoría en la actual campaña de rebajas.


Los clásicos sectores del vestido, el calzado y los complementos serán los que lideren las compras estivales en las que los aragoneses, según los cálculos de las asociaciones de consumidores, invertirán unos 76 euros, justo en la media del resto del país. Esta cifra supone un incremento del 5% respecto al año pasado que será también el que –confían los comerciantes– se refleje en la facturación final.


"Aunque desde 2013 existe una liberalización en los periodos de rebajas, por tradición y por hábitos de compra se siguen convocando rebajas para dar salida a los ‘stocks’", comenta José Antonio Pueyo, presidente la Federación de Empresarios de Comercio y Servicios de Zaragoza y Provincia (ECOS). En su opinión, desde que comenzó la crisis hace 6 años, "el consumidor ha concentrado sus compras en periodos de oportunidades y en el producto rebajado", esto es, muchos clientes tienen ya ‘fichada’ su presa previamente y aguardan a las rebajas para acecharla. Ayer, en las tiendas, se pudo comprobar cómo la mayoría de clientes que iban ‘a tiro hecho’ y conseguían hacerse, al fin, con tal o cual chaqueta rebajada que llevaban días vigilando. "Son solo diez euros menos, pero merece la pena", explicaba María Ángeles Alloza, con una falda ("apunta, talla 40") en la mano. A su juicio, el estreno de las rebajas hubo "más animación que aglomeraciones" y se dejaron entrever los tan traído y llevados "brotecillos verdes" que –confía– "se asienten de una vez por todas".


"Aprovechemos los descuentos ahora no vaya a ser que a la vuelta del verano vuelva a subir el IVA, que ese da más bocados que el propio Luis Suárez", comentaba con sorna Alfredo Sanchís, echando un ojo a la sección de reproductores mp3.


En las asociaciones de consumidores son menos optimistas en lo relativo a la recuperación del gasto –creen que la resurrección macroeconómica tardará en tener reflejo en los bolsillos– y aconsejan planificar las compras y estar atentos a las políticas de cambios y devoluciones. Para José Ángel Oliván, presidente de la Unión de Consumidores de Aragón, "el precio es un arma fundamental y su descenso favorece al consumidor" pero "el consumo proviene de la renta y, si los salarios siguen cayendo, es difícil cambiar la inercia"


La actual campaña de rebajas estivales, que se prolongará casi dos meses aunque pasada una semana ya escasean tipos y tallas, dependerá mucho de la climatología que justo ayer comenzó a empeorar. "Tras el bochorno de junio, ahora que no íbamos a comprar bañadores, resulta que dan lluvias toda la semana", se quejaban ayer dos señoras, que habían cambiado su plan de piscina (iban con un capazo con toallas) por las súbitas compras de rebajas. En unos días las nubes se despejarán para alegría de las tiendas de ropa que, en este periodo, se juegan hasta un 20% de su facturación anual.