Artistas de la segunda vida

'El cartón se esculpe', en el Aula de Medio Ambiente Urbano, y 'Antihéroes', en el Museo de Historia, propuestas actuales del hervidero creativo del arte del reciclaje en Zaragoza.

'Antihéroes'
Susana Blasco: "Instagram es sólo una herramienta más"

El arte reciclado y esa corriente que, de un tiempo a esta parte empuja al redescubrimiento de los objetos cotidianos, y a la elevación de retales, residuos, maderas viejas o hasta escombros de obra a la categoría de pieza artística, no es en sí mismo nada nuevo.


Ya el arte pobre (‘arte povera’) de los 60 se sirve de materiales humildes del entorno cotidiano para crear nuevas piezas como manifestación contra el gran consumo y la monotonía que impone la producción en serie.


En la actualidad, se multiplican en Zaragoza las iniciativas creativas y divulgativas que ponen en relación arte y reutilización, instando a la reflexión sobre las segundas vidas de los objetos y promoviendo la creatividad del "háztelo tú mismo" a partir de despojos en numerosos talleres.


Pero, ¿cuándo un desecho pasó a la categoría de obra de arte? En Zaragoza, un puñado de mentes inquietas y activas despuntan con voz propia en la corriente artística del arte reciclado.


El Aula de Medio Ambiente Urbano La Calle Indiscreta acoge hasta el próximo 22 de junio 'El cartón se esculpe', de Conchita de la Cueva. La pintora, en su "necesidad dar cuerpo y tridimensionalidad a las formas", tira del cajón de su fascinación por elementos de apariencia inerme -cartones, papeles y vigas de madera abandonadas de casas viejas del Pirineo-, para convertirlos en un desfile de cabezas, basadas en la concepción espacial de Gargallo. "Pasar del plano al espacio caracteriza mi forma de hacer", explica la artista, produciendo así representaciones intensas, de líneas marcadas y profunda carga filosófica.

José Azul y Gema Beatriz

Por la sala de exposiciones del Aula de Medio Ambiente Urbano han pasado otros nombres que encuentran en las segundas oportunidades de los objetos el punto de partida para la creación artística, como las impactantes formas de José Azul hechas con escombros y residuos de obra, o las elegantes esculturas de alambre de Gema Beatriz.


En la técnica de los collages geométricos a partir de fotografías antiguas que rescata de mercadillos se mueve Susana Blasco. Hasta el 24 de agosto el Museo de Historia de Zaragoza exhibe sus "Antihéroes", un proyecto experimental de fotografías realizadas con móvil de distintos objetos cotidianos colocados momentáneamente sobre retratos antiguos. Sin retoque fotográfico, estas imágenes se publican directamente en Instagram.


Susana Vacas o Sandy Montoro son otros nombres de la actividad artística zaragozana que bebe de la reutilización en sus propuestas. Y, en una vuelta a los orígenes y a la tierra, Lázaro Vela, de la galería San Cayetano, se erige como exponente del Land Art al "pincelar" sus obras con el cromatismo de las hojas secas y ramas que recoge en sus incursiones por el territorio aragonés.

Muebles de diseño de Petula Plas

Más cerca del diseño, también en el Casco Viejo, Petula Plas "repiensa" elementos recuperados para convertirlos en objetos funcionales como muebles, elementos de decoración y complementos. En su Centro de Reciclaje Creativo de la calle de Doctor Palomar exponen jóvenes creadores, y también allí fabrica objetos que acumulan ya historias vividas.


Aun afrontando el reto técnico de adaptarse al material base existente, a la creación a partir de lo encontrado, Petula subraya: "Una pieza nueva o hecha de fábrica está perfecta, nunca va a tener el alma y el encanto de los que se han hecho con material recuperado". Así, "el primer paso del diseño comienza con el propio objeto, te adaptas a sus formas, y siempre logras el cambio a mejor".


Entre las piezas de su estudio destacan los prototipos de mesas y sillas hechas con maderas recuperadas, que se expusieron en Rehogar, del Jardín Botánico de la Universidad de Valencia, y en el Drap Art que acogió el CCCB de Barcelona.