Objetivo: ningún niño sin comida

Más de 50 niños acudirán a partir de día 23 (cuando termina el curso escolar) a un comedor creado por vecinos y asociaciones del Actur para atender a los pequeños en riesgo de malnutrición. Cruz Roja, Ibercaja, La Caixa y varias oenegés reman también en esta dirección

Casi 100 niños pasarán por las colonias gratuitas de Cruz Roja este verano.
Casi 100 niños pasarán por las colonias gratuitas de Cruz Roja este verano

Los problemas no se van de vacaciones. Ni el hambre. Ni, tampoco, la angustia que sienten algunos padres y madres al ver que en casa no hay lo suficiente para comer o, al menos, para que el menú sea equilibrado. Las carencias nutricionales de los pequeños de los hogares en riesgo de exclusión se palían durante el curso escolar gracias a las becas de comedor y al esfuerzo de entidades sociales y vecinales (o incluso de particulares) por pagar el menú del compañero de clase que llega al aula desfallecido. Sin embargo, cuando el día 21 los colegios cierren sus puertas (y con ello las de sus comedores) solo las familias sabrán si pueden poner en la mesa algo más que patatas y pasta.


Por ello, los vecinos del Actur se han movilizado para montar un comedor que garantizará a 55 escolares con riesgo de malnutrición una comida al día todo el verano. La iniciativa comenzará el próximo día 23. Y similares iniciativas de apoyo a familias sin recursos lanzarán Cruz Roja, Ibercaja y varias oengés ante el cierre de los colegios.


La Plataforma por la Escuela Pública en Aragón, Izquierda Unida o CHA llevan semanas clamando para que se encuentre una solución: o bien que se abran los comedores escolares en julio y agosto, o bien que se organice una red para asistir en cada distrito al que lo necesita. Por si esto fuera poco, la defensora del Pueblo, Soledad Becerril, ha recomendado a las autonomías que abran sus comedores escolares públicos. En el otro lado, la DGA siempre ha insistido en que la Comunidad no tiene un problema de desnutrición infantil, y en que existe un protocolo de coordinación entre Educación y servicios sociales para evaluar y atender a estas familias.


Al margen del debate, lo cierto es que en Aragón ya hay organizaciones y personas que se han puesto manos a la obra para garantizar que ningún niño pase hambre este verano; en algunos casos, mediante comedores infantiles. No obstante, los expertos advierten: "El comedor es solo un gancho para trabajar en profundidad, y a través de los servicios sociales, la problemática de estas familias". Estos son algunos de los recursos que se van a activar de cara a este verano.CRUZ ROJA

Larga es ya la experiencia de Cruz Roja en este campo. La organización que hasta hace unos años atendía a un grupo de población en riesgo de exclusión más o menos estable, lleva un tiempo dando soporte a familias de clase media que, por el galopante ascenso del paro, sufren necesidades. La entidad organiza unas colonias que, a día de hoy, ya no tienen plazas libres. La mayoría de los niños tienen entre 3 y 12 años y están becados, así que no pagan nada. Además de ir a la piscina, jugar y relacionarse con los demás, comen un menú equilibrado en La Caridad, que cede sus instalaciones. Participan más de 30 voluntarios y el trabajo se organiza en tres turnos: del 30 de junio al 18 de julio; del 21 de julio al 8 de agosto y de 11 al 29 de agosto. A cada uno asisten 35 chavales. Todos los menores están valorados socialmente. Cruz Roja está estudiando nuevas opciones que podrían incluso materializarse este verano.el actur

Una experiencia sin par es la que reedita este año la Junta de Distrito Actur-Rey Fernando de Zaragoza, que va a destinar 4.000 euros (el año pasado fueron 3.000) para atender a 55 niños (en 2013 fueron 47). Estos pertenecen a familias desfavorecidas que no tienen garantizada la alimentación básica una vez que dejen de funcionar en junio los comedores escolares en los que tienen beca. Algunos casos llegan a través de los directores de los centros y otros por los servicios sociales. La experiencia se abre el lunes siguiente a la finalización del curso escolar, el día 23 de junio. En principio, se organizarán actividades para los chavales, que comerán en las instalaciones del centro de mayores Actur-Rey Fernando. Este equipamiento también tiene biblioteca infantil, algo perfecto para organizar más actividades. En esta iniciativa también participan el centro sociolaboral Mancala y el centro de tiempo libre Os Mesaches. En agosto, y a través del programa Zaragalla del Ayuntamiento de Zaragoza –en el que la inscripción es libre para familias con rentas mínimas– podrán acudir a la finca Gran Capitán.ayuda en acción

Ayuda en Acción colabora con dos colegios zaragozanos (Ramiro Solans y José Antonio Labordeta) durante todo el curso. La oenegé tiene en marcha una campaña mediante la que recauda fondos para dedicarlos a los alumnos de colegios españoles en los que los índices de pobreza son más elevados. En el caso del Ramiro Solans, por ejemplo, prácticamente el 100% del alumnado necesita beca para asistir al comedor y, gracias a los fondos de Ayuda en Acción ha sido posible mantener el servicio abierto durante el mes de junio. "De momento en Zaragoza no tenemos unas colonias como tales para este tipo de infancia, pero lo que hacemos es seguir intentando ampliar el programa de cara al curso que viene, y que más niños con necesidades puedan tener ayudas de comedor o para libros de texto", explican fuentes oficiales de la asociación.educo

Esta oenegé tiene una activa campaña para conseguir fondos para que los escolares estén bien alimentados durante el verano, y ofrece la opción de que el donativo se dirija en concreto a una comunidad autónoma, como es el caso de Aragón. A través de www.educo.org/becas-comedor/donativo es posible iniciar el proceso. Hay varias alternativas, como ingresar una donación única de 130 euros que cubre la alimentación del niño todo el verano, o hacerlo por semana (12,5€).ibercaja y la caixa

Estas dos entidades financieras han abierto sendas campañas este mes para recaudar dinero y comida para familias sin recursos. Ibercaja aspira a recoger, como mínimo, 10.000 kilos de comida y 75.000 euros (los primeros 25.000 lo pone ella). Lo que recojan se dará al Banco de Alimentos, que ha hecho hincapié en que los ciudadanos incluyan productos para el desayuno de los pequeños de la casa, como cacao, leche o potitos. Más información en: https://donativos.ibercaja.es. En el caso de La Caixa, la colecta se hace a favor de Cruz Roja y se mantendrá hasta el 6 de julio, tiempo en el que los clientes y empleados de La Caixa pueden aportar dinero a través de la plataforma ‘online’ www.nosabesqueeselhambre.es. en proyecto

Algunos barrios, como San José o Las Delicias, están planteándose organizar iniciativas parecidas a las del Actur, pero de momento no hay ningún proyecto firme en el tintero. En el Arrabal, algunos vecinos se han organizado durante el curso para asumir las becas de niños del Tío Jorge o el Eugenio López, y los propios profesores del Cándido Domingo han pagado el coste de algún menú anual. CHA ha pedido que se elabore un censo sobre los escolares que estén en riesgo de malnutrición y se establezcan becas de comedor durante los meses de verano. También el grupo de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Huesca ha instado al equipo de gobierno municipal a mantener durante julio y agosto la dotación económica de las becas de comedor concedidas desde el consistorio a las familias con escasos recursos a fin de garantizar una nutrición adecuada a los niños.